En el norte de Bali, en una zona montañosa, se encuentra la localidad de Munduk, donde la selva, los lagos y las cascadas son fuente inagotable de excursiones por su maravillosa naturaleza. La tranquilidad del entorno, mucho menos turístico que las zonas más visitas de la isla, hace de este enclave el lugar perfecto para pasar unos días en pareja en total tranquilidad.
Pareja en los arrozales de Jatiluwih. © Susana García. Cuando viajas a Bali probablemente lo que más te sorprende, por encima de sus templos, sus playas o la cordialidad de sus habitantes, es el bullicio y el tráfico, sobre todo el tráfico, que invade las zonas más turísticas para restar enteros a la experiencia turística. Por eso, aun sabiendo que si se viaja a Bali es casi imposible no pasar unos días en Ubud para conocer sus lugares más turísticos, a pesar del jaleo, merece la pena alejarse a otros rincones de la isla más sosegados. Uno de ellos es Munduk , donde, a tan solo dos horas en coche de Ubud, podrás encontrarte con la esencia del Bali más auténtico y un lugar donde pasar unos días con tu pareja en total tranquilidad.
La principal ocupación en una estancia en Munduk serán las excursiones en la naturaleza : una frondosa selva y amplios arrozales ofrecen el mejor marco para rutas de senderismo y las cascadas un escenario perfecto para vuestras fotos y un lugar idílico para darse un baño. Todo envuelto en esa espiritualidad que emana de sus templos, auténticos centros sociales en la vida de los balineses.
Arrozales de Jatiluwih Visitar algún arrozal en Bali es obligatorio, ofrecen la imagen más icónica del interior de la isla, esa de grandes terrazas verdes salpicadas con palmeras. Ubud es el lugar de referencia para visitarlos, pero, si queréis disfrutar de un paseo mucho más tranquilo por este tipo de cultivo, los arrozales de Jatiluwih son una excelente opción.
Paseo por los arrozales de Jatiluwih. © Susana García. Se encuentran a 43 kilómetros de Munduk y tardarás algo más de una hora en llegar hasta ellos por una bonita y sinuosa carretera. Una vez allí, hay que dedicar un rato a pasear entre los cultivos y las acequias, descubrir su sistema de inundación y, por qué no, comprar algún paquete de arroz local en uno de sus puestos. Además, es muy recomendable echar un vistazo a los paneles explicativos donde puedes descargar planos con las rutas de senderimo en los códigos QR que aparecen. Como en casi todos los rincones de Bali, aquí también encuentras un escenario para las fotos, con atrezo para que te queden de lo más locales y perfectas para las redes sociales.
Cascadas Si pasas unos días en la zona de Munduk puedes dedicar una jornada a conocer las cascadas que salpican esta frondosa zona de selva tropical. La más cercana y accesible es la cascada de Munduk (conocida también como la cascada del Coral Rojo), un bonito salto de agua al que se accede tras 650 metros de paseo.
Otras de las más conocidas son las cascadas gemelas de Banyumala , a las que se llega desde la localidad de Wanagiri y que se encuentran a sólo 12 kilómetros de Munduk. Como suele suceder en casi todos los accesos a cascadas, hay que tener cuidado por la pendiente y por el suelo irregular, pero en unos veinte minutos se abren ante los ojos estas preciosas caídas de agua. Otra cascada cercana a Munduk que merece una visita es Banyu Wana Amertha , con una amplia caída en una poza donde es posible darse un baño de lo más refrescante y conseguir unas fotos de diez.
Cascadas de Banyu Wana Amertha. © Karthik Sreenivas. Algo más lejos se encuentran las cascadas Git Git , a 30 kilómetros hacia el norte, a 10 kilómetros de la localidad de Singaraja que se recorren por una sinuosa carretera. A ellas se llega por un bonito y cómodo paseo por la selva y es posible refrescarse con un baño en las pozas que forma el río. Primero te encontrarás con dos cascadas gemelas antes de llegar a la más grande de ellas, con cuarenta metros de caída en medio de un frondoso paisaje.
Buyan y Tamblingan, los lagos gemelos Una de las excursiones más bonitas que puedes hacer desde Munduk es la que te lleva a los lagos gemelos Tambligan y Buyan, que ocupan dos cráteres volcánicos. Para empezar, hay que contemplarlos desde los miradores , para admirar la belleza de un entorno que enmarca en verde profundo estas dos enormes masas de agua. Como en casi todos los rincones panorámicos de Bali, aquí también encontraras un escenario con columpios y otros elementos de atrezo para que tus fotos queden perfectas.
Columpio en los miradores sobre los lagos Buyan y Tamblingan. © Susana García. Lo mejor es contratar una excursión organizada para que, con un guía especializado, podáis descender atravesando la selva hasta el borde del lago Tamblingan. En el camino, podréis conocer los secretos de este ecosistema de selva tropical, sus plantas y algunos de sus animales. Después, recorrer uno de los lagos en una canoa tradicional, llamadas perahu , hasta llegar al templo de Pura Ulun Danu Buyan es una de las mejores experiencias que podéis vivir en Bali. El broche a la excursión lo pondrá un paseo por este templo, poco visitado y uno de esos lugares para reconciliarse con el misticismo de la isla lejos de las masificaciones.
El templo flotante de Ulun Dunu Bratan En Bali hay muchos templos, casi en cada excursión pararás en alguno, todos con la misma estructura hinduista pero cada uno con su personalidad. Uno de los más importantes y bellos del país es el de Ulun Dunu Bratan, un templo hinduista-budista dedicado a Dewi Danu, la diosa del agua. Sus edificios se han construido en pequeñas islas que se contemplan desde un paseo junto al lago. Es uno de los templos más populares del país, por lo que suele estar muy concurrido (mejor ir temprano) y cuenta a su alrededor con amplia infraestructura de ocio con puestos de comida y tiendas de souvernirs.
Templo flotante de Ulun Dunu Bratan. © Romeo A. Guía práctica de Munduk Dónde dormir En la zona de Munduk hay numerosos alojamientos pequeños e integrados en la naturaleza. Pero si quieres un lugar realmente especial, una buena opción es el Munduk Moding Plantation . Aquí, además de servicios de lujo y piscinas privadas en cada bungalow, las vistas son espectaculares.
Cómo moverse Es muy habitual alquilar un coche o una moto en Bali para moverse, sobre todo en la zona de Denpasar y Ubud. Sin embargo, la complejidad de las carreteras de la zona de Munduk hacen muy recomendables las visitas guiadas, con las que además aprenderás sobre la flora y fauna local. En las recepciones de los alojamientos pueden ayudarte a buscar la mejor opción para realizarlas con guías locales.
Qué llevar en la maleta La zona de Munduk es húmeda durante todo el año, por este motivo no pueden faltar en tu maleta un chubasquero y buen calzado resistente al agua, ya que es fácil encontrar barro en las excursiones, sobre todo en las inmediaciones de las cascadas. Por lo demás, ropa cómoda de algodón y alguna prenda de manga larga para las noches.
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