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Nantes con amigas, descubrid la ciudad extraordinaria que soñó Julio Verne

Nantes ha sabido reinventarse y lo ha hecho a lo grande, ya que el arte y la creatividad son actualmente sus abanderados. Pasear por esta ciudad con amigas supone un viaje extraordinario lleno de sorpresas.

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Plaza Real con instalación artística de Stéphane Vigny. © Martin Argyroglo/ LVAN

Julio Verne nació hace mucho tiempo en Nantes. Concretamente en 1828. Casi 200 años han transcurrido desde entonces, pero resulta inevitable pensar en la figura del autor de Cinco semanas en globo cuando se visita su ciudad natal. Porque aquí entenderás perfectamente por qué el escritor fue capaz de imaginar un universo poblado de fantasía, inteligencia, rebeldía y, sobre todo, diversión. No lo pienses más y organiza una escapada a Nantes con amigas.

Y es que nos encontramos en un territorio donde lo extraordinario se vuelve realidad. Un lugar que invita a disfrutar y que sigue inspirando a artistas, arquitectos y poetas urbanos que han dotado a los espacios públicos, por muy sagrados que éstos sean, de una singularidad especial. Porque Nantes ha hecho del arte su gran apuesta y uno de sus grandes motores turísticos. ¿Quieres saber una de las razones? Tiene un presupuesto cultural de nada menos que 60 millones de euros al año.

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Mirador realizado por Tadashi Kawamata. © Martin Argyroglo/ LVAN

Resulta difícil decidir por dónde comenzar nuestro itinerario por esta hermosa ciudad de 310.000 habitantes bañada por el Loira. Lo más cómodo es buscar una línea verde trazada en el suelo y seguirla. Porque marca la ruta de “Le Voyage a Nantes”, un gran proyecto artístico liderado por el “iluminado” Jean Blaise (así le llaman los nanteses). Eso sí, no tienes que tener prisa, porque tiene una extensión de nada menos que 12 kilómetros.

Hay paradas en numerosas obras realizadas por artistas contemporáneos y también os señalizará los monumentos que no hay que perderse de la ciudad, sus tesoros desconocidos y extraños, sus callejuelas históricas, sus barrios de arquitectura vanguardista, miradores que cortan el hipo, las orillas del estuario… Es un recorrido pensado para pasear, para dejarse sorprender, para admirar los monumentos, para embelesarse y gozar. Así que apuntaos.

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Instalación en un parque de juegos de Detroit architectes. © Franck Tomps/ LVAN

Una ciudad reinventada

Nantes ha sabido reinventarse, porque hasta hace apenas 30 años fue una ciudad industrial con un paisaje de humo, chimeneas y naves anodinas en torno al Loira. Un entorno que se ha ido transformando con intervenciones artísticas y que se ha ido incorporando a la metrópoli de una forma atractiva y creativa. Y también arriesgada. Pero ahí está la clave de su éxito.

Así, de esta manera, surgió uno de sus grandes focos creativos, la Isla de Nantes. En un viaje con amigas a Nantes es obligatorio que vayas a este barrio sostenible, ecológico y vanguardista. Porque descubriréis que donde antes hubo fábricas, diques secos, viejos almacenes e instalaciones portuarias, hoy encontraréis todo un laboratorio urbano con un nuevo concepto de ciudad, reinventado por arquitectos de la talla de Jean Nouvel o Christian de Portzamparc.

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Elefante articulado de Nantes. © Franck Tomps/ LVAN

Paseo en un elefante de 48 toneladas

Acercaos a la Isla de las Máquinas, con su mayor protagonista, un Gran Elefante articulado, de 12 metros de altura y 48 toneladas, que levanta sus torpes extremidades de madera junto a los viandantes, y a cuya grupa os podréis subir si lo deseáis. Además de todo un bestiario fantástico, encontraréis también un carrusel maravilloso de animales marinos. Y jardines temáticos, salas de conciertos, un laboratorio de música, un teatro y bares y restaurantes con terraza, donde podréis hacer un “break” en vuestro recorrido por la ciudad. Así que disfrutad de esta delicia de barrio que tiene en su perímetro también un campus universitario, con más de 4.000 estudiantes y 100 investigadores, y un conglomerado de empresas culturales.

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Le Jardin Kadupo. © Ville de Nantes

Advertiréis que otra singularidad de Nantes es su apuesta por el medio ambiente. De hecho, se ganó a pulso en 2013 el título de Capital Verde Europea, y es que se nota que invierte en esta materia un presupuesto que triplica el de la media francesa. Además, la ciudad tiene la suerte de contar con más de 293.000 árboles y de estar surcada por 250 kilómetros de ríos: Loira, Erdre, Sèvre, Cens y Chezine. Y a los nanteses les gusta moverse por la ciudad en tranvía, en barcos lanzadera, en coches compartidos y en bicicleta. Ahora además pueden disfrutar del recién inaugurado “Jardin Extraordinaire” inspirado en el universo de Julio Verne.

Los atractivos esenciales de Nantes

Son tantos los atractivos turísticos que descubriréis en un viaje a Nantes con amigas que, seguramente, os tocará seleccionar, aunque no queráis. Por eso, os sugerimos 10 lugares que son imprescindibles si queréis empaparos de las señas de identidad de una ciudad con la que cualquier artista soñaría:

Índice de visitas:

1. El castillo de los duques de Bretaña. 2. La catedral de San Pedro y San Pablo. 3. De compras por el Pasaje Pommeraye. 4. “Le Nid”, el mirador. 5. Memorial de la Abolición de la Esclavitud. 6. Mercado de Talensac. 7. Itinerario Estuaire. 8. Museo d’Arts. 9. Los Anillos de Daniel Buren. 10. Museo de Julio Verne.

1. El espectacular castillo de los duques de Bretaña.

Construido en el siglo XV como palacio residencial y fortaleza militar, fue el primer castillo del Valle del Loira. Desde 2007 alberga el nuevo Museo de Historia de Nantes y sus fosos están ajardinados para uso y disfrute de la ciudad. Descubrirás en algún momento un tobogán de 50 metros que va de la Torre de los Españoles hasta el foso de la fortaleza. Es el “Paisaje deslizante” que han propuesto Tac Architectes & Tangui Robert, en este espacio sagrado e histórico.

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Castillo de los duques de Bretaña. © Philippe Piron

2. La catedral de San Pedro y San Pablo.

Levantada entre los siglos XV y XIX, tiene la particularidad de que sus bóvedas son más altas que las de Notre-Dame de París. También merece un vistazo su fachada gótica con dos torres y la tumba de Francisco II y de Margarita de Foix. Es una obra maestra renacentista.

3. De compras por el Pasaje Pommeraye.

Dicen que es único en Europa. Es una bellísima galería cubierta del siglo XIX que ha inspirado a numerosos artistas, desde el cineasta Jacques Derry al dibujante de cómics Jacques Tardi, pasando por los surrealistas. Es un espacio comercial con una monumental escalinata recargada de esculturas e iluminada por una cristalera cenital que no debéis perderos en vuestra escapada a Nantes con amigas.

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Pasaje Pommeraye, Nantes. © Philippe Piron/ LVAN

4. “Le Nid”, mirando a la ciudad desde lo alto.

Debéis de subir hasta el piso 32 de la Torre de Bretaña para disfrutar de unas vistas espectaculares de la ciudad. Aquí se encuentra el bar “Le Nid”, el lugar donde se cobija una monumental escultura a caballo entre una cigüeña y una garza. La decoración es obra del artista Jean Jullien, que la completó con enormes cáscaras de huevo que hacen la función de sillas y mesas.

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Bar Le Nid. © Marc Domage/ LVAN

5. Memorial de la Abolición de la Esclavitud.

Naroximtes fue el gran puerto negrero de Europa, pues desde aquí zarpaban más del 40% de los barcos destinados a la trata de esclavos. Este terrible episodio del pasado no lo olvidan los nanteses y por eso decidieron alzar un memorial en el muelle desde el que salían los barcos. Un gesto artístico y también un homenaje a todos los que luchan contra cualquier forma de esclavitud en el mundo.

6. Mercado de Talensac.

Es el mercado más antiguo de la ciudad. Fue inaugurado en 1937 y es toda una institución. Aquí podréis encontrar productos de proximidad, vino Muscadet, pescado y crustáceos de Loira-Atlántico… y mucho más. Una delicia.

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Vino de Nantes. © Ciudad de Nantes.

7. Itinerario Estuaire.

Es toda una sucesión de obras vinculadas al arte contemporáneo. Encontraréis, en un recorrido que va de Nantes a Saint-Nazarie, una casa enorme hundida en el río, el esqueleto metálico de una serpiente de 120 metros de largo, una mini casa en el orificio de salida de una chimenea industrial… y muchas más sorpresas. Todo un derroche de talento. La ruta la podéis hacer en coche o en barco.

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Una serpiente en el océano. © Franck Tomps/ LVAN

8. Museo d’Arts.

Su colección de 12.000 obras alberga joyas que van del siglo XII hasta la actualidad. Así que podréis contemplar obras que van de George de La Tour a Pablo Picasso, pasando por Sonia Delaunay, Max Ernst, Maurizio Cattelan y Anish Kapoor.

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© Museo de Arte de Nantes.

9. Los Anillos de Daniel Buren.

El artista francés Daniel Buren creó una serie de 18 anillos gigantescos que miran al Loira desde una de sus orillas y que ofrecen recortes paisajísticos muy particulares. Esta percepción se modifica al caer la noche, porque los anillos se tiñen de aureolas de color rojo, verde y azul, los tres colores básicos de los que surgen todos los demás.

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Uno de los anillos de Daniel Buren. © Martin Argyroglo/ LVAN, ADAGP 2019

10. Museo de Julio Verne.

Un viaje a Nantes con amigas no estaría completo si no decáis un rato a visitar el Museo de uno de sus ciudadanos más ilustres, Julio Verne, quien se inspiró en su ciudad natal para gestar su extraordinaria (y fantástica) obra literaria. Descubriréis libros y documentos originales, ilustraciones, fotografías, juegos, objetos, películas y manuscritos. Y os adentraréis en el universo de un hombre que hizo posible que soñáramos con un mundo mejor.

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Restaurante La Cigale. © Le goût et les couleurs/ LVAN

CONSEJOS ETHERIA

Comer en La Cigale.

En Nantes se come muy bien. Podréis elegir entre una amplia oferta de restaurantes diseminados por toda la ciudad. Si queréis ir a un restaurante especial, reserva en Le Cigale. Es uno de los más antiguos de estilo modernista de Francia. Data de 1895 y fue el cuartel general de los surrealistas. Su recargada decoración de cerámica, espejos y esculturas le ha valido la declaración de monumento protegido.

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Crucero entre Nantes y Saint Nazaire. © Franck Tomps/ LVAN
Hacer un crucero.

Si tienes oportunidad, no te olvides de dar un paseo por el Loira en cualquiera de los cruceros Estuaire que parten de Nantes y se encaminan hacia Saint-Nazarie. Podrás descubrir alguna de las impactantes obras artísticas del proyecto “Estuaire” y disfrutar de un paisaje espectacular. Es un recorrido de dos horas y media de duración que cuenta con los comentarios de un guía local. Eso sí, este servicio sólo funciona de abril a octubre.

Más información

www.levoyageanantes.fr www.nantes-tourisme.com

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