Desde las canteras de Hontoria, Cubillo y Tornadijo hasta la Catedral de Burgos, te proponemos un recorrido desde la oscuridad de las entrañas de la tierra hasta la cegadora luz de uno de los mayores representantes del gótico en España. Celebra el aniversario de la Catedral de Burgos realizando un viaje de 800 años en un trayecto de apenas 20 kilómetros. Visitantes en la galería La Catedral. © Pepa García Te has preguntado alguna vez de dónde sale la piedra necesaria para construir los grandes templos y otras construcciones que salpican nuestra geografía? Canteras como la burgalesa de Hontoria, Cubillo y Tornadijo guardan secretos y narran historias apasionantes. En el octavo centenario de la Catedral de Burgos nos hemos propuesto visitar algunas de las galerías de donde salió esa piedra caliza blanca y reluciente, resistente pero dócil, que ocupa fachadas, capillas y puede retorcerse hasta crear figuras inverosímiles.
Paseando entre sombras, las canteras de Hontoria, Cubillo y Tornadijo Para conocer el origen de la Catedral de Burgos sólo hay que recorrer los 20 kilómetros que separan la capital burgalesa de los montes de Hontoria de la Cantera, Cubillo del Campo y Tornadijo . Bajo la superficie de estas poblaciones, se sitúa un amplísimo entramado de galerías plagado de luces y de sombras. Un potencial que ha descubierto la industria publicitaria y las producciones audiovisuales casi antes que el viajero ocasional. Allí se han rodado anuncios como los de Fanta (Batalla de Sabores ) y la Cerveza San Miguel, el videclip de ‘Un camino para volver ’ de Conchita (con una sorprendente puesta en escena), el anuncio del libro de C L V para Aponiente , o, entre otros, el vídeo de promoción de Turismo de Burgos. Todos ellos sitúan sus relatos en la particular atmósfera de estas canteras. Pero este lugar es mucho más que un plató de rodaje.
© Fotograma del videoclip de Conchita. Más de 300 monumentos han sido realizados con la piedra de estas canteras Las estelas funerarias romanas, la ermita visigótica de Quintanilla de las Viñas (siglos VII y VIII), monasterios románicos como el de San Quirce de los Ausines, y otros 300 monumentos –algunos tan espectaculares como la Catedral de Burgos– atestiguan la importancia y calidad de la piedra caliza extraída de estas canteras. Dichas explotaciones, valoradas durante siglos únicamente de un modo industrial, se han convertido en un recurso turístico y didáctico gracias al proyecto ‘Patrimonio de la luz. Conjunto monumental’ . Dicho proyecto, puesto en marcha por la empresa que explota las canteras desde hace unos diez años, Calizas de Burgos, es sólo el inicio del objetivo global de revalorizar turísticamente toda la zona.
Para que te hagas una idea del tamaño de estas canteras, te diremos que las dos galerías inactivas y abiertas al público, La Catedral y El Pozo, (pronto habrá una tercera, la galería de La Luz) representan sólo un 1% de toda la explotación. Hoy día sigue en activo la cantera Agustín, por lo que el corazón pétreo de estos montes sigue latiendo dentro y fuera de nuestras fronteras. Esa inmaculada piedra (con un 96-98% de carbonato cálcico) incluso lucirá próximamente en China, donde se están enviando bloques (1.000 m3) para construir la mayor escultura de Quanzhou.
Entrada de la galería La Catedral. © Pepa García Galería La Catedral En la visita a las canteras de Hontoria, Cubillo y Tornadijo, la primera galería que se visita se denomina La Catedral . Con sus 55.000 m3 de vaciado te hace sentir muy pequeño cuando caminas por las distintas salas y pasadizos tenuemente iluminados por un generador. No son más de 660 metros de recorrido pero es suficiente para hacerte una idea del duro trabajo realizado por los canteros desde hace más de mil años.
La voz del guía se pierde a veces en la penumbra mientras relata historias que comenzaron hace 80 millones de años, cuando la piedra caliza se comenzó a formar y el mar lo cubría todo. Narraciones que también recuerdan a los canteros y el traslado de los bloques en carros tirados por bueyes. Y finalizan mencionando el trabajo de los presos durante la Guerra Civil, y del uso posterior de la galería como polvorín del Ejército. De esta última época permanecen rampas y caminos preparados para la entrada de pesados camiones.
«La clausura militar definitiva tuvo lugar en 1994, a partir de ahí, vandalismo e, incluso, se comenta que rituales satánicos… pero, por suerte, ha sido recuperada y admite visitas» Sombras chinescas en la galería La Catedral. © P.G. Mientras el guía alumbra vetas con su linterna, incide en el valor de la piedra inmaculada, motivo por el cual es más frecuente ver en las paredes la de tonos amarillentos y rojizos. Los respiraderos que conectan la caverna con el exterior, realizados para permitir la ventilación en un ambiente cargado del polvo de la roca al ser rallada, permiten un baño de luz natural que se agradece en el interior. La sala más amplia, el Auditorio, tiene forma de anfiteatro y una gran columna central, un pilar de seguridad que llega del suelo al techo. Justo ahí se han rodado algunos de los anuncios mencionados anteriormente, y también se realizan conciertos. El paseo no se hace largo, continúa entre galerías, y caminos donde las sombras se proyectan de forma natural (la intención es realizar en el futuro un teatro de sombras).
La salida al exterior devuelve al cuerpo la temperatura robada en el interior, y tras unos instantes al sol, comienza la segunda parte de la aventura. Es necesario recorrer en coche los pocos kilómetros que distan hasta la Galería El Pozo.
Grúa situada en la galería de El Pozo. © Pepa García Galería El Pozo Una vieja grúa marca el lugar donde dejar el vehículo y te da la pista definitiva de que has llegado a la siguiente parada, ahora en Cubillo. La Galería del Pozo, llamada así porque allí se realizó un pozo para proveer del agua necesaria a la cantera, aún parece tener vida a pesar de su inactividad.
Al penetrar en la galería, también iluminada por un generador, los restos de bloques y piedras indican cómo era la explotación, los trabajos de cantería sobre la roca, se pueden ver los raíles sobre los que se desplazaban las vagonetas… La sensación es la de que el tiempo se hubiese paralizado en este lugar. En el transcurso del paseo te invitarán a convertirte en cantero, y a utilizar distintas herramientas: mazas, picos y piquetas. No es tan fácil como parece pero desestresa bastante. Si la visita en la Galería La Catedral se centraba en los datos históricos, ésta permite conocer los fundamentos de las antiguas explotaciones y su evolución.
Los visitantes pueden probar las herramientas de los canteros. © P.García Pero no sólo los canteros trabajaban en el interior de este tipo de canteras, también se desplazaban hasta allí algunos escultores que aprovechaban la humedad de la glera para pulir sus obras. La visita finaliza en el círculo iluminado de un respiradero, rodeados de sombras, estalactitas y banderolas. No podría haber mejor photocall de despedida.
Si viajas con niños, rétales a descubrir los fósiles incrustados en las paredes, sobre todo corales, algas y alguna concha de vieira que atestiguan el pasado marino de estas capas.
Galería El Pozo. © Pepa García Ruta turística por las poblaciones cercanas Tras conocer los orígenes de la catedral, recorre los bonitos pueblos de Hontoria de la Cantera (no te pierdas la fachada de su iglesia parroquial, realizada por el taller de Siloé), Cubillo del Campo , Tornadijo y Madrigal antes de continuar el viaje hasta la capital burgalesa.
Una vez en Burgos puedes seguir la pista a la piedra de Hontoria visitando el Castillo, la puerta de Santa María, la Casa del Cordón, la iglesia de Nuestra Señora de la Merced, el Hospital del Rey, y, por supuesto, el monasterio de las Huelgas y la Catedral de Santa María de Burgos.
Respiradero de la galería El Pozo, en las canteras de Hontoria, Cubillo y Tornadijo. © Pepa García Catedral de Burgos, una joya gótica con 800 años Si es la primera vez que visitas la Catedral de Burgos, te recomendamos que la imagen inicial que admires de este monumento declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco sea desde el mirador del castillo. Desde ese punto privilegiado, se dice que el templo parece un barco varado en medio del casco histórico, un faro en el Camino de Santiago… Y en eso hay que darles la razón porque este templo gótico si hay algo que transmite es luz, una luz que se multiplica gracias a su piedra, sus elevadas dimensiones, y sus bellas vidrieras.
Catedral desde el mirador del castillo. © Pepa G. Ha pasado mucho tiempo, ocho siglos exactamente (consulta los eventos por su VIII centenario ), desde que el obispo Mauricio pusiera la primera piedra en 1221 en el lugar donde se hallaba una antigua catedral románica. Sin embargo, el valor de este templo no ha hecho más que crecer, adaptándose a los nuevos tiempos (¿se colocarán finalmente las polémicas puertas encargadas a Antonio López?). Lo más recomendable es recorrer la catedral sin prisa, disfrutando de cada detalle, de sus muchas capillas, esculturas y simbología. Las paradas obligadas las tienes descritas en la app de la catedral que funciona como una completa audioguía gratuita.
Catedral de Burgos. © Pepa García Qué ver en una visita corta a la Catedral de Burgos No te pierdas las portadas, el crucero y el cimborrio, la sacristía Mayor, el trascoro, las capillas de Santa Tecla, la Concepción y la Natividad, la preciosa escalera dorada, el claustro alto, el coro, el retablo Mayor, la sala Capitular y nuestra favorita, la capilla de los Condestables . Antes de marcharte recorre también el claustro bajo, con interesantes exposiciones. En la catedral hay dos cosas aseguradas: la sorpresa ante tanta perfección y el dolor de cuello por tratar de admirar sus altísimas bóvedas.
Cimborrio de la Catedral de Burgos. © P.G. Si te interesa conocer la catedral en profundidad, te recomendamos reservar una visita guiada. Y si ya quieres llevar hechos los deberes, este programa de RNE (Ocho siglos de travesía ) te va a interesar.
Guía de viaje | Etheria Magazine Visitas guiadas a las canteras de Hontoria, Cubillo y Tornadijo De martes a domingo: a las 10, 12 y 17 horas. Patrimonio de la Luz .Google Maps .
Escalera dorada de la Catedral de Burgos. © Pepa García Visitas a la Catedral de Burgos Precio: general (7 €), niños hasta 14 años (2 €), estudiantes (4,50 €)… consulta otros descuentos. Se pueden adquirir online con un horario determinado lo que evita colas.
Visita guiada con Civitatis desde 5 €. No siempre está operativa.
En la Catedral puedes elegir comprar la entrada individual o conjunta con la exposición ‘Lux’ de Las Edades del Hombre . Si dispones de tiempo, merece la pena admirar las 120 obras que han llegado de catedrales de toda España.
Rutas en Burgos 📌 Si eres aficionado a la fotografía, existe una ruta de miradores en Burgos que también ofrece interesantes puntos de vista. Descarga el pdf .
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Misterios en la cantera de Hontoria, Cubillo y Tornadijo y en Burgos capital 📌 Descubre los misterios y energías sobrenaturales de estas canteras en Cuarto Milenio, el programa de Iker Jiménez .
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