Kandy, conocida popularmente como “la abuelita mochilera”, demuestra que la pasión por los viajes no sabe de edades. Su vida dio un gran giro tras su jubilación: colgó la toga y decidió hacer realidad su sueño de dar la vuelta al mundo con 65 años. Y lo hizo, además, en solitario.
Kandy, la abuelita mochilera. El periplo viajero de Kandy alrededor del planeta comenzó en Argentina y continuó por Centroamérica, Estados Unidos, Nueva Zelanda, Australia, Hong Kong, Vietnam, Camboya, Tailandia e India. Ahora con más de 80 años continúa viajando y soñando, como cuando era niña, con «pisar todos los países que veía en su Atlas».
Entrevista a Kandy, la abuelita mochilera 1. ¿Cuál es el primer viaje que recuerdas? Cuando mis padres me llevaron de mi pueblo, Íscar, un pueblecito de la provincia de Valladolid, a Bilbao y descubrí el mar. Aquello no lo olvidaré nunca, es uno de esos recuerdos que se guardan en lo profundo de la mente y que nunca se puede olvidar.
2. ¿Cuál es tu principal motivación al viajar? El descubrir cada día algo nuevo. No me gusta la rutina, el saber que hoy es igual que ayer, y mañana será igual que hoy, rutas marcadas, caminos conocidos… Prefiero ir haciendo yo el camino. Si me caigo me levanto pero es un camino desconocido y la expectación de cómo será, me llena de adrenalina.
3. ¿Qué consideras que te han aportado los viajes? ¿Por qué los aconsejarías? Los viajes me han aportado mucho: disfrute, amistades, ver ‘in situ’ aquellos lugares que solo conocía por los libros o por las imágenes televisivas, descubrir que el mundo es mucho más seguro de lo que nos parece cuando lo imaginamos sentadas en nuestro confortable sillón. Y, también, que el placer que obtienes cuando descubres nuevos países es algo que no nos podemos perder.
«Creo que el viajar es como una droga, que cuando la descubres no puedes prescindir de ella».
4. Si pudieses elegir un compañero de viaje. ¿Quién sería y por qué? Sería la mochila que me ha acompañado en todos mis viajes. Es fantástica, siempre me da la razón y siempre coincide conmigo en los caminos que más me gustan. Y cuando me paro a contemplar una puesta de sol, no me dice, “vale Kandy, creo que ya deberíamos irnos”, no, ella, allí se espera pegadita a mi lado hasta que yo decido cuando es el momento de partir. No cambiaría su compañía por la de ningún otro ser viviente.
5. ¿Sueles planificar con antelación tus viajes o prefieres improvisar? Cuando estoy en casa pienso donde me gustaría ir pero cuando llego al lugar elegido, mi ruta es como una planta de mimbre, me adapto conforme sople el viento.
6. ¿Cómo te entretienes en las esperas de los aeropuertos? Cada espera es distinta. A veces, si hay wifi, pongo mis correos al día, y si no, ordeno fotos, o si estoy muy cansada, busco un lugar apropiado y duermo un poquito. Pero, la mayoría de las veces, encuentro a otros viajeros con los que intercambiamos información sobre nuestros viajes.
7. ¿Cuál ha sido el mejor viaje de tu vida? Sin duda alguna, mi primera vuelta al mundo. Me jubilé con 65 años, después de muchos años de trabajo, y busqué inmediatamente en las agencias de viajes una “vuelta al mundo”. Cuando tuve los billetes aéreos en la mano “flipaba”. Al fin llegaba el momento de hacer realidad mis sueños y, por mucho que lo hubiese anhelado, imaginando una y mil veces como sería el ir yo sola con mi mochila, la realidad lo superó con creces.
8. ¿Y tu último viaje? ¿Qué es lo que más y lo que menos te ha gustado de ese destino? Mi último viaje, hace 8 días, ha sido Birmania. Ya lo conocía de antes pero siempre que la visito de nuevo, descubro rincones que me sobrecogen. Entiendo que cuando Marco Polo llegó a Bagan dijese que era el lugar más fascinante del mundo. No me gustó ni me gustará su situación política actual, donde los Rohinyás tienen que huir a Bangladés.
9. ¿Qué tres viajes que hayas realizado recomendarías a cualquier mujer? En primer lugar la India, este país cambió mi vida, también disfruté mucho en Méjico y Guatemala y, cómo no, el inmenso Salar de Uyuni.
10. ¿Qué país te ha ganado con su gastronomía? ¿Destacarías algún plato o producto? Me adapto siempre a las comidas del lugar.
11. ¿En qué medio de transporte prefieres viajar? Sin duda, en autobuses públicos porque me encanta interactuar con los lugareños y los viajes se me hacen muy amenos.
12. ¿Qué es lo que nunca falta en tu bolsa de mano? Una crema solar y una botella de agua mineral.
13. ¿Escribes un listado antes de hacer la maleta? Como viajo mucho es fácil. Lo que llevo en el último viaje lo lavo, lo ordeno o lo repongo para llevarlo de nuevo.
Una bola de cristal de esas que al moverla nieva.