Porto Santo siempre será la hermana pequeña de Madeira pero, no por ello, es una segundona. De hecho, lo que te proponemos es que rompas la norma y conviertas esta isla en tu destino principal de vacaciones en el archipiélago madeirense. Si quiere saber qué ver en Porto o por qué deberías visitarla, sigue leyendo.
Mirador de Portela, las mejores vistas de Porto Santo. © P.G. El archipiélago de Madeira está formado por las islas de Madeira, Porto Santo y algunos islotes deshabitados. No te aburriremos con muchos datos históricos o geográficos, solo unas pinceladas básicas para que lo ubiques: se encuentra en el océano Atlántico, a unos mil kilómetros de Europa y a 500 de África. Fue descubierto por navegantes portugueses en 1418, por lo que el idioma, la gastronomía y muchas tradiciones fueron importados de Portugal. La sensación de choque cultural, por tanto, no la tendrás durante tu estancia.
La pequeña isla de Porto Santo , muy poco visitada por el turismo español, es un destino perfecto para desconectar sin estresarte por las famosas «visitas obligadas». En este lugar, la máxima debe ser dejarse llevar, improvisar, sentir el lento paso del tiempo mientras se pasea por la playa o se toma una poncha (bebida típica de Madeira) en alguna taberna. Y para completar la experiencia, nada mejor que disfrutar de los sabores portugueses : bacalao o pescado a la brasa, ricos arroces o una cataplana de pescado y mariscos. Los vinos tienen un sabor singular, pruébalos a ver si te gustan. En Porto Santo hay alguna bodega pero la mayoría llegan de la vecina Madeira. Si no te gusta arriesgar, siempre puedes optar por una cerveza Coral.
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Qué ver en Porto Santo Pero, comencemos por el principio: la organización del viaje. ¿Cómo llegar a Porto Santo? Existen dos opciones para llegar a la isla: la primera, vuelo directo desde Lisboa; y la segunda, con escala en Funchal (capital de Madeira) volando desde Oporto o Lisboa. Puedes aprovechar la escala para dar una vuelta por Funchal y luego tomar otro vuelo a Porto Santo o bien un ferry que te permitirá ir disfrutando de la brisa y el color del océano.
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Si optas por el ferry , el barco te dejará muy cerca de Vila Baleira, la capital de Porto Santo, un buen lugar para reservar alojamiento si quieres tener cerca algo de ‘vidilla’ con bares, terrazas y lugares donde salir por la noche. Otra opción es dormir en algún hotel o vivienda más aislada donde gozarás de total tranquilidad.
Bien, ya estamos en Vila Baleira y ¿ahora qué? Lo más recomendable es dar un paseo por la población para que empieces a familiarizarte con ella. Su tamaño es reducido pero guarda pequeñas joyas como la Casa Museo Cristóbal Colón , donde dicen que el navegante residió algún tiempo. En su interior se recrea la época del Descubrimiento y se pueden ver retratos de Colón y mapas de rutas marítimas. También es interesante que te pases a conocer la iglesia Matriz , conocida como de la Piedad, que es uno de los principales monumentos de la población y su interior no está nada mal. Toma nota también del Centro de Artesanía , situado cerca del casco antiguo, donde se divulga y venden productos artesanales del archipiélago; el Fuerte de San José , que tiene 8 pequeños cañones de hierro (ahora es una propiedad privada); y el «curioso» monumento a los Descubrimientos.
Molinos situados junto al Mirador de Portela. © P.G. Excursiones desde Vila Baleira Un poco a las afueras, no hay que dejar de ir al Mirador de Portela (a 1,5 km) que ofrece unas fantásticas vistas de la playa de Porto Santo, del pico de Baixo y de la isla de Cima. Junto al mismo se encuentra un conjunto de molinos de viento , auténticos iconos del paisaje de Porto Santo. El primero fue construido en 1794 y, a partir de ahí, fueron edificándose otros, algunos de los cuales aún permanecen. Su función era la de moler cereales para hacer el pan.
Si disfrutas con las panorámicas, acércate también a la capilla de Nuestra Señora de Gracia , que está situada en un altozano y que era el lugar elegido por los vecinos para ocultarse cuando se producían incursiones piratas.
Excursión por la costa de Porto Santo © P.G. Para conocer el resto de la isla lo mejor es alquilar un coche y dejarte imbuir por la calma que transmiten sus solitarias carreteras, o bien contratar una excursión organizada y olvidarte de los mapas. En una ruta en coche todoterreno por Porto Santo hay algunas paradas que debes tener en cuenta:
• Quinta das Palmeiras Situada en una pequeña colina, ocupa más de cinco mil metros cuadrados de vegetación y cuenta con un pequeño zoo, un mini jardín botánico y numerosas especies ornitológicas y vegetales. Es un lugar que gustará especialmente a los niños.
Sorprende la variedad de aves de la Quinta das Palmeiras. © P.G. • Columnas del Pico Ana Ferreira Esta visita es recomendable tanto por las vistas de la Isla de Fora y de los picos de Facho y de Castelo, como por las columnas de prismas con formas irregulares generadas por la actividad volcánica. Se conoce como el piano y seguro que encuentras curiosas perspectivas para hacer fotos creativas.
Cantera de Ana Ferreira. © P.G. • Fonte da Areia Aunque su nombre sigue haciendo referencia a la antigua fuente donde manaba un agua muy rica en nutrientes, hoy día lo que podrás ver es un curioso paisaje formado por dunas petrificadas que muestran la erosión y el paso del tiempo.
Dunas petrificadas en Fonte da Areia. © P.G. • Ponta da Calheta Un rincón perfecto para darse un baño, pasear por la playa y comer en el restaurante Ponta da Calheta que hay junto a la playa. Y si ya te quedas a ver el atardecer, no hay nada que lo supere.
Playa de Porto Santo, a los pies de Vila Baleira. © P.G. Una isla con súper poderes Puede parecer exagerado decir que la arena de Porto Santo tiene poderes mágicos pero ¡es que los tiene! Está compuesta por sedimentos de coral, conchas y erizos de mar, y se recomienda para aliviar enfermedades reumáticas y óseas. La arena es, de hecho, un elemento básico en los tratamientos que se desarrollan en el Centro de Geomedicina de Porto Santo. Así que… no huyas cuando tus amigos o tus hijos intenten ‘enterrarte’ en la arena de la playa.
Además, no es la única que contribuye a que te sientas mejor, también el agua del mar es empleada en tratamientos de talasoterapia debido a su alto contenido en estroncio, cromo y yodo. Incluso el agua mineral cuenta con ricos componentes que benefician a la salud. Si no te encuentras en plena forma, puede ser un buen momento para probar las bondades de la talasoterapia. Suele ayudar bastante cuando se tienen problemas de estrés, cansancio, fatiga, sedentarismo, osteoartritis, desórdenes digestivos o, incluso, para recuperarte tras el parto.
Si llegas en barco, fíjate en la ‘planta industrial’ que está junto al puerto, realmente el líquido verde que sube por los tubos contiene microalgas que se emplean para la industria alimentaria y cosmética. Un proyecto realmente interesante que se realiza en cooperación con la empresa murciana Buggypower
Plato de pulpo del restaurante de Ponta da Calheta. © P.G. Guía práctica de Porto Santo Dónde dormir • Hotel Pestana Porto Santo. Está situado junto a la mejor playa de la isla y rodeado de un bonito jardín tropical. Cuenta con piscinas, gimnasio, pista de tenis… y funciona como un ‘todo incluido’. Abre a partir del 1 de mayo de 2019. Tel. +351 291 144 000Hotel Porto Santo & Spa . 4 estrellas. Habitaciones, algunas con jardín privado, y villas junto a un palmeral. Dispone de spa y restaurantes. Tel. 351 291 980 140
Hay muchos más hoteles, solo tienes que consultar la web de información de Porto Santo para localizar otros que se adapten a tus necesidades concretas.
Cómo moverse • Si quieres hacer una excursión a Madeira puedes ir en ferry con el barco Lobo Marinho (2 horas y media), de la empresa Porto Santo Line (www.portosantoline.pt). También te permite llevar el coche.
Rutas a pie Una de las mejores maneras de descubrir la geografía de Porto Santo es realizando alguna caminata o trekking (también tiene montañas).
No te pierdas Si aún no tienes fecha para tus vacaciones, te sugerimos que las hagas coincidir con el Festival de Colombo que se celebra en septiembre. Se suele recrear el ambiente de la época del Descubrimiento y se organizan divertidas actividades.
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