En la isla de Manrique, donde el tiempo transcurre a otra velocidad y la calma se adueña poderosamente de nuestro ser, decidimos recorrer uno de los paisajes más fascinantes del archipiélago canario: los de La Geria, donde lo hostil del terreno no impidió a sus habitantes llevar adelante el cultivo de uno de los vinos más auténticos y especiales de todo el país. Paisaje de La Geria. © OT Lanzarote Pocas cosas hay más relajantes que recorrer en coche las carreteras lanzaroteñas . El tráfico es escaso; las prisas, nulas; y las razones para deleitarnos con las vistas al otro lado de la ventanilla, infinitas. Así, entre joyas en forma de playas y calas, volcanes, montañas e incluso monumentos, nos topamos con La Geria: el paisaje vinícola de la isla y uno de sus grandes tesoros .
Y lo es en forma y fondo: solo hay que contemplar la singular manera en la que los viñedos están dispuestos en el terreno para entender que la relación hombre-naturaleza, en este rincón del mundo, llegó a un pacto para poder subsistir. Aquí la uva es cultivada en suelos áridos golpeados por los vientos alisios y sobre gruesas capas de lava y arena volcánica conocidas como lapilli .
Plantadas en hoyos circulares de unos 6 metros de diámetro, y excavadas en la tierra a entre 20 cm y 2 metros de profundidad, las vides son protegidas a su vez por muros de roca volcánica que las rodean en semicírculos.
La Geria, los viñedos de lo imposible Han llegado a ser llamados “los viñedos de lo imposible” y, sin embargo, dan lugar a una maravillosa producción de vinos de los más valorados, en su mayoría, blancos jóvenes. La uva que predomina es la malvasía volcánica , autóctona de la isla, cuya vendimia tiene la peculiaridad de ser de lo más madrugadora: se trata de la primera en llevarse a cabo en toda Europa, ya que arranca en el mes de julio.
Antes de empezar la ruta que nos llevará a recorrer La Geria en busca de algunas de sus bodegas más aclamadas —valga decir que existen 18 bodegas adscritas al Consejo Regulador de Denominación de Origen Vinos de Lanzarote—, retrocedamos en el tiempo unos siglos para entender su historia. La historia de los vinos de Lanzarote.
Viñedo de La Geria. Un viaje a los orígenes Hubo una época, allá por el siglo XVI, en la que el vino era el principal producto exportado desde la isla. De hecho, se halla en Lanzarote la bodega más antigua de todas cuantas hay en Canarias. Pero el origen de su historia se halla, según cuentan, en los primeros colonizadores normandos , quienes tiempo después de la conquista llevaron desde Francia las primeras vides para comenzar a cultivarlas.
Ya con el descubrimiento de América en el siglo XV, y debido a todos aquellos navíos que hacían parada en el archipiélago antes de continuar su viaje hasta el Nuevo Mundo, la producción aumentó para tener capacidad suficiente para suministrar a los marineros en sus travesías . Sin embargo, aún en aquella época, lo que protagonizaba el paisaje lanzaroteño eran sobre todo otros tipos de cultivo más centrados en el cereal. Tras las erupciones del Timanfaya , entre 1730 y 1736, la isla quedó en gran parte enterrada en ceniza y se vio obligada a reinventarse adaptándose a las novedades del terreno. Así fue como se generalizó la faceta vinícola que otorgó esos peculiares paisajes que hoy, varios siglos más tarde, continúan extendiéndose a lo largo y ancho de Lanzarote.
Estos inmensos campos de lava negra de cuyas entrañas emergen, en contraste, los brotes verdes de sus vides, se concentran sobre todo en la zona de La Geria, que comprende los municipios de Tinajo, Teguise, San Bartolomé, Tías y Yaiza . Por su singularidad, han sido declarados Paisaje Natural Protegido .
Cata en bodega El Grifo. El Grifo, la más antigua No puede haber viaje a las bodegas lanzaroteñas que no tenga parada en la más clásica de todas. El Grifo fue fundada en 1755 y no es solo la bodega más antigua de las Islas Canarias: también está entre las 10 más históricas de España. Se extiende a lo largo de 40 hectáreas y visitarla supone poder pasear por sus jardines y viñedos, conocer el sistema de cultivo de cerca y contemplar sus instalaciones originales, hoy día transformadas en el interesante Museo del Vino El Grifo . Entre fotografías antiguas y paneles informativos lucen una gran cantidad de piezas antiguas utilizadas en su producción, entre ellas una bomba de trasiego de 1865 o una encorchadora de 1870.
Museo de Bodega El Grifo. El edificio, además, corresponde a un perfecto ejemplo de arquitectura tradicional de la isla, esa que se caracteriza por muros de piedra volcánica y que conserva sus vigas de madera originarias procedentes, en su mayor parte, de barcos antiguos.
Para acabar la visita a El Grifo —cuyo símbolo, por cierto, fue diseñado por el mismísimo César Manrique —, nada como catar el producto: bien en su coqueta sala, bien en su acogedora terraza, podemos probar algunos de sus vinos más emblemáticos acompañados, además, por quesos típicos de la tierra.
Curioso paisaje de La Geria. Bodegas Rubicón o cómo reinventarse Para conocer bien la historia de estas antiguas bodegas hay que viajar en el tiempo hasta 1570: de esta fecha data el primer documento escrito que hace referencia a la propiedad, que ya en el siglo XVII se convirtió en una de las fincas más preciadas y ricas de Lanzarote. También entonces se levantó en ella la ermita de La Caridad.
En sus orígenes la finca Rubicón se dedicó al cultivo cereales como la cebada, el trigo o el centeno, pero tras ser sepultados durante las erupciones del Timanfaya, como le ocurrió a muchas otras familias lanzaroteñas, se vieron obligados a reinventarse. Así surgió la apuesta por los viñedos.
Tras pasar por numerosas manos, fue en 1979, con la adquisición de la finca por Don Germán López Figueras , cuando las antiguas bodegas se abrieron al público: actualmente en sus instalaciones se pueden realizar visitas guiadas, catas de vinos, eventos privados y degustaciones . También se puede visitar su tienda con el objetivo de volver a casa acompañados del mejor recuerdo de la isla: una de sus botellas de vino. Aunque no hay duda, una de las experiencias más atractivas es la de tomarlos mientras se disfruta de algunos de los platos canarios más tradicionales en el restaurante de las bodegas, que ocupa, además, la construcción más antigua de la propiedad. Frente a ella, nuestra siguiente parada.
Cata de vinos en Bodega La Geria. La Geria, vinos y paisaje Conserva también la estructura tradicional primigenia el edificio que alberga la bodega La Geria , muy cercana a la localidad de Uga. Fundada en el siglo XIX, una de las cosas que más nos sorprende es su localización , pues se halla rodeada por un inmenso —y maravilloso— escenario vitícola protagonizado por miles de vides. Una postal a la que se añade, además, la silueta de los volcanes del Parque Nacional de Timanfaya al fondo: irremediablemente quedamos hipnotizados.
Para aprenderlo todo sobre el sistema vinícola lanzaroteño y sobre la historia de esta antigua bodega, lo ideal es apuntarnos a una de las visitas guiadas que se organizan desde la propia La Geria y que nos permite conocer sus instalaciones de primera mano, pasear por sus viñedos, y acabar la experiencia catando algunos de sus vinos más señalados: cuenta con 13 propuestas diferentes . 45 minutos para una visita de lo más completa.
Tienda de Bodegas La Geria. Tradición e innovación en bodegas Stratvs Son dos palabras perfectas para definir la esencia de esta joven bodega lanzaroteña: situada en el norte de la isla, a los pies del Parque Natural de Timanfaya, STRATVS nació en 2008 decidida a dar un giro a la manera de trabajar los vinos de Lanzarote, pero siempre manteniendo las bases de esa tradición centenaria que tanto le ha dado a quienes les dedican su vida. Se trata de una de las bodegas más modernas que, además, apuesta por el respeto al medio ambiente como medida para mejorar la calidad de los vinos, algo que se ve reflejado en el uso de las tecnologías más novedosas, pero también en su arquitectura e instalaciones, vanguardista y tradicional a partes iguales.
Para conocer un poco más de cerca su labor, lo ideal es acercarnos hasta su Tienda Gourmet : un paraíso en el que los productos delicatesen nacionales y locales encuentran su lugar y en el que no solo es posible adquirirlos para llevárnoslos de vuelta a casa, sino que también se pueden catar in situ , aprovechando la ocasión para probar, de paso, sus vinos. ¿Qué mejor ocasión para brindar por la vida?
Bodega La Geria, en Lanzarote. Puro Rofe: la historia de un sueño “Puro Rofe es una realidad vitivinícola en la isla de Lanzarote acordada entre valientes locales y amables forasteros”. Es esta la carta de presentación del bellísimo proyecto en el que, desde la humildad y el sacrificio de quienes pelean con el corazón por llevar adelante trabajos bonitos, se logra cumplir uno de los mayores sueños de sus impulsores: el de embotellar el paisaje de los viñedos de Lanzarote . Y lo llevan logrando desde 2017, cuando arrancó esta aventura.
Desde Puro Rofe elaboran de manera artesanal y desde un lagar típico de la isla sus vinos, a los que apenas añaden sulfitos y a los que dejan descansar, macerarse y respirar el tiempo que necesiten, sin prisas ni agobios: se interviene lo justo en la elaboración y salen de la bodega únicamente cuando se valora que están listos para tomar. Carmelo Peña y Vicente Torres , enólogos de Puro Rofe, tienen algo en claro: sus vinos son y serán especiales . Únicos. Un fiel reflejo de la propia tierra lanzaroteña y un absoluto homenaje a los viñateros, quienes están detrás de cada sorbo de sus caldos.
Guía Lanzarote | Etheria Magazine Cómo llegar a Lanzarote Existen diferentes aerolíneas que conectan en vuelo directo distintas ciudades españolas con la isla de Lanzarote, por ejemplo Vueling, Air Europa, Iberia o Ryanair.
Cómo moverse por Lanzarote La manera más práctica y fácil de moverse por la isla, debido a que sus atractivos se encuentran dispersos por todo el territorio y a que las dimensiones son manejables, es alquilando un coche. La mayor parte de las carreteras son de un solo carril por sentido pero son tranquilas, no demasiado transitadas y envueltas en un paisaje que, ya por sí mismo, invita a recorrerlas sin prisas.
Dónde dormir La mayor parte de los alojamientos se hallan concentrados en Arrecife, la capital de Lanzarote, y en zonas algo más turísticas como Costa Teguise o Puerto del Carmen. Sin embargo, escaparse a zonas más tranquilas como la localidad interior de Teguise, donde se celebra un animado mercadillo cada fin de semana, permite alojarse en lugares repletos de encanto como Palacio Ico , un hotel boutique de 9 habitaciones que ocupa un edificio del 1690. Las grandes cadenas hoteleras también cuentan con propuestas a lo largo y ancho de la isla. Por ejemplo, el Barceló Teguise Beach , recién restaurado y con más de 300 habitaciones de líneas elegantes y modernas, se halla situado frente a la playa y es solo para adultos.
Viajar sola a Lanzarote Pocos lugares más tranquilos y seguros existen para viajar sola que esta hermosa isla del archipiélago canario. Conducir por sus hermosas carreteras mientras se disfruta del espectáculo paisajístico al otro lado de la ventanilla, se conocen sus principales emblemas naturales y monumentos y se descubre la interesantísima historia de sus bodegas y vinos. Es un plan ideal para realizar en cualquier época del año, ya se realice en solitario o con amigas.
También en Etheria Magazine 7 planes esenciales en Lanzarote con amigas .
Ruta de César Manrique en Lanzarote .
10 planes en Fuerteventura con amigas para disfrutar al máximo de la isla .