Los juguetes sexuales también forman parte del equipaje femenino, no importa si viajas sola o con pareja. Te contamos lo que debes tener en cuenta a la hora de incluirlos en la maleta y las restricciones de entrada de algunos países que los clasifican al mismo nivel que la pornografía.
El tamaño de los juguetes sexuales en el equipaje de mano es importante. Actualizado 5/2024
Hacerse listas con lo que tienes que llevar, empezar a hacer la maleta unos días antes de viajar u organizar la ropa con antelación son algunos de los trucos para no dejarte nada. Si las muestras de productos de aseo son un básico a la hora de volar sin facturar, los juguetes eróticos o sexuales son un imprescindible que no te puede faltar. Disfrutar del sexo debe ser un must tan importante como desconectar en tu tiempo libre.
Básicos en el equipaje Bañador, pijama, calzado, crema solar, ropa de abrigo, un libro… A la hora de hacer la maleta, cada una tiene sus trucos para no dejarse nada. Hacerse listas con lo que hay que llevar o colocar todo sobre la cama antes de introducirlo en la maleta son algunos de ellos. También ayuda empezar a organizar las cosas con unas horas o días de antelación.
Otra estrategia es tener la maleta “medio hecha” con cosas que solo utilizamos fuera de casa o preparar una bolsa de aseo de viaje. Para ello solo necesitas tener un cepillo de dientes, desodorante o peine diferentes del que usas habitualmente. Las muestras que te dan en algunas tiendas de cosmética se convierten en un básico a la hora de viajar con botes pequeños o champú en sobres. No sólo viajarás con menos peso, sino que el hecho de tener una bolsa de aseo o productos específicos de viaje (consulta los neceseres para mujeres viajeras ) te será de gran ayuda para no olvidarte nada y sentirte más ligera. A la hora de revisar que no te dejas nada recuerda empezar por lo esencial. Cepillo de dientes, ropa interior, pasaporte… Una lista de “imprescindibles” en la que no te puedes olvidar de lo más importante. Y si hay algo esencial para tu bienestar, además de los productos de aseo e higiene personal, son tus juguetes eróticos de viaje.
© We-Vibe Chorus. Juguetes sexuales siempre en la maleta Si viajar es siempre emocionante, irse de vacaciones nos da la oportunidad de parar y descansar. Echar siempre un buen libro en el bolso o bolsa de mano te ayudará a empezar a desconectar en esos ratos muertos de tránsito o en el aeropuerto. Dar paseos por la playa, salir a desayunar o sentarse en un café con vistas al mar te ayudarán a empezar a relajarte. Pero además, estar en un sitio nuevo y alojarte en un lugar desconocido puede ayudarte a despertar tu libido. Estar en una habitación de hotel, dormir entre sábanas blancas o bajar un rato al spa pueden ser suficientes motivos para que te entren ganas de sexo. Las vacaciones también pueden ser la oportunidad para retomar actividades de ocio que durante el curso vas dejando aparcadas. Apuntarse a un curso o retomar algún hobby pueden ser una opción si no sales de tu ciudad. A medida que te relajes te irá apeteciendo más dedicarte a las cosas que te gustan y te dan placer. Y qué mejor idea que empezar por cuidarte y dedicar un tiempo a ti.
En el terreno del autocuidado, la sexualidad debería estar en el número uno de prioridades de cara a tu bienestar. No sólo en pareja, sino también empezando por tener sexo contigo misma. Si quieres que tanto tus relaciones de pareja como la masturbación formen parte de tus vacaciones, no podrás salir de viaje sin llevar alguno de tus juguetes sexuales. A la hora de viajar con ellos, ya sea por placer o por trabajo, deberás tener en cuenta algunas cuestiones prácticas.
Vacaciones en Maldivas. © Ishan Seefromthesky Países que los penalizan Países como la India , los Emiratos Árabes Unidos o las Maldivas imponen restricciones a los juguetes sexuales; algunos no aceptan entrar con ellos y otros los clasifican dentro de la categoría de material pornográfico ilegal, al mismo nivel que las armas de fuego o los explosivos. Así que antes de viajar, asegúrate de que pasarán el control del aeropuerto investigando la política de importación de juguetes sexuales. No sólo evitarás que te los confisquen, sino también las multas o peor, penas como la cárcel.
El tamaño sí importa, un juguete mini Antes de viajar, comprueba las restricciones de equipaje. Si tu vibrador excede el límite de tamaño podría ser confiscado. Lo aconsejable es llevar un dispositivo más compacto, como el Tango que tiene el tamaño de una barra de labios, batería recargable y 8 niveles de intensidad (89 €). ¡Ideal para viajes!
El silencio es oro, 3 modelos discretos Busca juguetes con ajustes de viaje. De este modo evitarás sonidos, pulsaciones o vibraciones procedentes de la maleta al pasar el control de seguridad del aeropuerto o cuando la dejes en el compartimento superior del avión o el tren. Si tu juguete funciona a pilas, debes retirarlas antes de viajar para evitar que salten las alarmas de rayos X. El delgado y ergonómico We-Vibe Melt (149 €) viene con una función de bloqueo de viaje que garantiza que no se encenderá por sí solo, mientras que el ecológico We-Vibe Chorus es recargable.
© LIBERTY de Lily Allen. Ojo, ¡el lubricante es un líquido! Igual que tienes que meter los artículos de aseo personal en una bolsa transparente de aeropuerto, la recomendación de llevar botes de prueba se extiende al lubricante. El Lovehoney viene en botellas de 100 ml, por lo que puedes llevarlo en el equipaje de mano, aunque también hay opciones monodosis . El 37% de las personas piensan que el lubricante es su mejor aliado en el dormitorio y el 87% cree que tiene más probabilidades de llegar al orgasmo cuando lo usa, así que no te lo dejes en casa.
Como recuerda Johanna Rief, responsable de empoderamiento sexual de We-Vibe: «Es importante que nos informemos antes de viajar para evitar cualquier problema en el punto de entrada al país de destino”. Dada la gran cantidad de opciones que ofrece el mercado, tanto si viajas sola como en pareja, llevar tus juguetes sexuales puede convertir unas buenas vacaciones en una experiencia aún mejor y hasta tus viajes de trabajo serán placenteros.
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