Covarrubias, en la lista de los “pueblos más bonitos de España”, siempre es un planazo de fin de semana, pero aún más si le sumamos la curiosa historia de la princesa Kristina de Noruega. En esta villa burgalesa os esperan su reposo eterno, la capilla de San Olav, levantada por expreso deseo de la noble nórdica, y un buen número de visitas de interés. ¿Os lo vais a perder?
Covarrubias, uno de los pueblos más bonitos de España. © Etheria Magazine Esta escapada burgalesa debe comenzar mencionando a Kristina de Noruega, una bella princesa nórdica cuya triste historia te conquista al instante, tanto como la cuidada impronta medieval de Covarrubias. Esta villa, que no llega a los seiscientos habitantes, exhala historia en cada uno de sus rincones e invita a dejarse llevar por la intuición porque vayáis donde vayáis encontraréis referentes únicos y aparecerá alguno de sus ocho Bienes de Interés Cultural. Todo está perfectamente preservado, gracias a una acertada y temprana declaración (1965) de Conjunto Histórico Artístico. Pero, ¿qué relación tiene una princesa nórdica como Kristina de Noruega con Covarrubias? Os lo contamos.
Escultura de la princesa Kristina de Noruega en Covarrubias. © Etheria Magazine Quién fue Kristina de Noruega La princesa Kristina Håkonsdatter (1234-1262), nacida en Bergen e hija del rey Haakon IV de Noruega, fue una víctima más del engranaje político y las alianzas habituales entre los reinos del siglo XIII. En este caso, su padre tuvo a bien desposarla con un hermano del rey Alfonso X el Sabio. Con poco más de veinte años emprendió un largo viaje desde Noruega para satisfacer tanto los deseos de su progenitor, que veía en este enlace una oportunidad para sus ambiciones comerciales en Europa, como los del monarca castellano, que aspiraba a liderar el Imperio Germánico. Acompañada por una expedición de consejeros y nobles damas (se cree que estaba compuesta por más de cien personas), pasó por Inglaterra y atravesó Francia antes de pisar la península ibérica.
Fue recibida con honores en tierras aragonesas y catalanas antes de su llegada a Soria el 22 de diciembre de 1257. La Nochebuena la pasó en el monasterio de las Huelgas de Burgos , donde permaneció hasta el 28 de ese mes antes de continuar su viaje hacia Valladolid. Se cuenta que durante su estancia en Valladolid recibió una carta con una propuesta de matrimonio del rey Jaime I de Aragón, al que había conocido en su trayecto y se había quedado impresionado por su belleza. Sin embargo, Kristina le rechazó, puede que por la diferencia de edad o porque la alianza hubiese resultado menos ventajosa. Eso nunca lo sabremos…
Princesa busca esposo Ya en tierras castellanas, el siguiente paso fue elegir al futuro esposo entre los hermanos de Alfonso X, una quiniela que se redujo por diversos motivos a dos candidatos: Fadrique y Felipe . Según narraron las crónicas noruegas, Fadrique no convenció a la comitiva (o a la princesa) porque tenía el rostro desfigurado por un accidente de caza. Felipe era más agraciado, sensible y culto. Este joven de 26 años, que ostentaba los títulos de abad de la Colegiata de San Cosme y San Damián de Covarrubias y era arzobispo de Sevilla, tuvo que ser dispensado de sus deberes eclesiásticos. La pareja contrajo matrimonio el 31 de marzo de 1258 en la Colegiata de Santa María de Valladolid y se establecieron en Sevilla.
La existencia de Kristina, dicen que marcada por la nostalgia, fue efímera ya que falleció en 1262, sólo cuatro años después de su llegada y sin dejar descendencia. Se rumorea que su enfermedad y la dificultad para adaptarse al clima sevillano contribuyeron a su prematura partida. En 1265, Felipe contrajo matrimonio con Leonor Rodríguez de Castro, cerrando así el capítulo con la princesa noruega.
Tumba de Kristina de Noruega en la Colegiata de Covarrubias. © Ecelan CC BY-SA 4.0 La tumba de Kristina Aunque no existen registros que confirmen que Kristina de Noruega visitara Covarrubias en vida, su conexión con este pintoresco lugar se reveló de manera inesperada. En los años cincuenta del siglo pasado, la Academia Burgense de Historia y Bellas Artes, que estudiaba los sepulcros de la Colegiata de Covarrubias, descubrió en uno de ellos los restos momificados de una mujer elegantemente vestida. Su cabellera rubia y una estatura superior a la media castellana llamaron su atención. Los versos de amor hallados en el interior del sepulcro y escritos por Felipe –recordemos que había sido abad de ese templo– no dejaron lugar a dudas: era Kristina. Hoy día, cuando las chicas solteras visitan su tumba tocan la campana del claustro porque dice la leyenda que así encontrarán el amor que a la princesa le fue negado.
Colegiata de Covarrubias. © Etheria Mag. La capilla de San Olav Tras este hallazgo, y habiendo trascendido que la princesa le había pedido al infante Felipe de Castilla una capilla en honor a San Olav , santo del que era muy devota, la Fundación Kristina de Noruega decidió hacer realidad ese deseo en 2011 (753 años después). La impronta del templo, situado en un prado a tres kilómetros de su tumba, contrasta con la arquitectura medieval de Covarrubias. El vanguardista proyecto que ganó el concurso es obra de Pablo López Aguado y Jorge González Gallego , de la Escuela de Arquitectura de Valladolid. Curiosamente, se ha basado en estudios de varias ermitas prerrománicas y románicas como la de Santa Cristina, en Santa Pola de Lena. Esta es, sin duda, la visita más sorprendente de Covarrubias y la primera ermita del siglo XXI .
Las imágenes que podéis ver del exterior en Internet, con su altísima torre exenta, no le hacen justicia. Una vez allí os sorprenderán, sobre todo, sus amplios espacios interiores llenos de luz, donde no sólo se puede rezar sino también aprender gracias a las exposiciones sobre la princesa y la vida de San Olav que se presenta en tres facetas de su vida: el vikingo, el Rey y el Santo. También se realizan conciertos y otros evento, consultad la agenda en la web de la capilla de San Olav . Y si os interesa conocer el Camino de San Olav en España en esta web (www.caminodesanolav.es) encontraréis información.
Capilla de San Olav, en el valle de Lobos, a 3 km de Covarrubias. © Turismo Rural Arlanza Qué más ver en Covarrubias La visita a Covarrubias puede comenzar junto a la escultura dedicada a Kristina de Noruega, situada frente a la Colegiata de San Cosme y San Damián . Además del sarcófago de la princesa en el claustro, se pueden ver las tumbas de Fernán González y su esposa Doña Sancha de Navarra. También dignos de interés son el órgano del siglo XVII, los altares barrocos, las tablas de Berruguete y Van Eyck y el tríptico de la Adoración de los Reyes Magos, atribuido a un discípulo de Gil de Siloé. En el templo, que cierra los martes, se permiten las visitas por libre o guiadas por el párroco.
Una de las bonitas calles de la villa con el Museo del Libro al fondo. © Turismo Covarrubias Torreón de Fernán González El Torreón de Fernán González (torreondefernangonzalez.es), conocido también como el torreón de Doña Urraca, es el monumento más llamativo de Covarrubias. Su historia se remonta al siglo X, aunque cuenta con añadidos posteriores, y desempeñó un papel crucial como elemento defensivo. Cuenta con una puerta en una posición elevada, aproximadamente en la mitad de la torre, con un arco de herradura. Se puede pasar al interior y subir a los pisos superiores para disfrutar de unas impresionantes vistas panorámicas de Covarrubias y sus alrededores. La colección expuesta de maquinarias bélicas medievales os transportará a una época donde no faltaban las intrigas ni las batallas. Según cuenta la leyenda, aquí encerró su padre a la Infanta Doña Urraca como castigo por sus romances con un pastor.
Crucero y torreón de Fernán Núñez. © Turismo Covarrubias Murallas de Covarrubias Aunque gran parte de las murallas han desaparecido, los vestigios restantes ofrecen una visión tangible de la función defensiva que alguna vez desempeñaron. Pasear junto al tramo que discurre entre la excolegiata y el puente invita a reflexionar sobre la época en que fue levantada y cómo parte de las mismas debieron ser derribadas para “orear” la villa durante una epidemia de cólera en el siglo XVI.
Murallas de Covarrubias junto al río Arlanza. © Etheria Mag. Casa de Doña Sancha En la animada plaza de Doña Sancha se sitúa la casa más antigua de la población, del siglo XV, con una atractiva fachada de adobe y entramado de madera. Su gran balconada, en la planta superior, le permite obtener luz solar durante todo el año. Como hoy día alberga un restaurante, La taberna de Doña Sancha , merece mucho la pena hacer una parada para probar las especialidades locales y tomar un respiro después de tantas emociones.
Casa de Doña Sancha. © Turismo Covarrubias Museo del Libro Otra de las visitas imprescindibles en Covarrubias es su Museo del Libro, alojado en una preciosa construcción de estilo herreriano de mediados del siglo XVI. No os costará reconocerla por su desproporcionado escudo. El edificio fue concebido para albergar el Archivo del Adelantamiento de Castilla, pero perdió su función en el siglo XVIII al ser trasladado a Simancas. Actualmente, en la planta baja está la oficina de turismo y en las dos superiores se sitúa el Museo del Libro, un espacio que muestra la evolución y la importancia de los libros a lo largo del tiempo.
El Museo del Libro se sitúa en el antiguo edificio del Archivo. © Etheria Mag. Casas del Obispo Peña y la Antigua Botica Por último os aconsejamos localizar también otras dos casas singulares. La primera perteneció a Don Pedro Peña, Arzobispo de Quito y Verapaz en el siglo XVI, en cuya fachada se puede ver una placa, un escudo y llamativos canes tallados. Y la segunda es la Antigua Botica , una farmacia, excelentemente reformada (incluso fue premiada por ello), que muestra las características habituales de las construcciones de Covarrubias y ese sabor añejo que nos encanta descubrir. Aunque parece anclada en el tiempo, permaneció abierta hasta 1975.
Casa del Obispo Peña. © Turismo Covarrubias Y así, entre visitas, paseos, recuerdos de Kristina de Noruega y algún que otro vino rosado de la D.O. de Arlanza habréis pasado un fin de semana inolvidable en la provincia de Burgos . Garantizado.
✅ Más información : Turismo de Covarrubias .
✅ Para saber más sobre Kristina de Noruega:
Fundación Princesa Kristina (fundacionprincesakristina.com)
📍Libros: La flor del norte , de Espido Freire y Viaje a Al Ándalus , de Per Erik Borge.