Reserva algún fin de semana para disfrutar de los pueblos, rutas, paisajes y buena gastronomía del Valle de Ambroz una zona perfecta para visitar con los colores del otoño.
Disfruta del otoño en el Valle del Ambroz. © DIVA El otoño es el momento ideal para visitar el valle de Ambroz y recorrer los increíbles paisajes que alberga Cáceres en este privilegiado rincón. Aunque si esta fecha no cuadra en tu agenda, en cualquier momento del año serás bien recibido. A continuación encontrarás algunos de los atractivos que más han llamado nuestra atención y que no puedes perderte.
La judería de Hervás ¿Necesitas motivos para visitar el Valle del Ambroz? Te damos unos cuantos. Este valle alberga la judería de Hervás , declarada Conjunto Histórico Artístico y que presume de ser una de las mejor conservadas de España. Sus callejuelas empedradas, casas de adobe, balconadas y entramados de madera conducen hacia la calle Rabilero, donde encontraremos suficientes tascas como para saciar nuestra sed y dar rienda suelta al umami, el que dicen que es extraoficialmente el quinto sabor —y que caracteriza tanto al jamón ibérico de bellota—.
Hervás cuenta con la judería mejor conservada de España. © Ayto. de Hervás Aguas termales en Baños de Montemayor En este valle, los romanos convirtieron Baños de Montemayor en un oasis dentro de la Vía de la Plata. Las aguas termales y sulfurosas atraen a quienes buscan aliviar ciertas dolencias y paliar el estrés. Elegantes casonas y mansiones de estilo Belle Époque recorren todo un pueblo cuya vida gira en torno a sus balnearios.
Tan importantes son sus aguas que en junio, cada año, los vecinos de Baños celebran el Termarium, la fiesta que da la bienvenida a la temporada termal.
Segura del Toro tiene a este icónico animal en el centro del pueblo. © Visit Ambroz Un toro y un castillo en Segura del Toro Un enorme toro de piedra preside el centro del pueblo de Segura de Toro. Al miura celta —de origen romano en realidad— lo rodean edificios con grandes sillares de piedra, una construcción muy popular en la zona. Además, este pueblo mira al resto del valle desde su propio castillo templario .
Practicar senderismo en otoño es uno de los grandes placeres en el Valle del Ambroz. © DIVA Caminatas en el Valle del Ambroz Los tonos ocres que adquiere esta zona del norte de Extremadura nada tienen que envidiar a los de los bosques de Massachusetts. La ruta Heidi parte de la localidad de Hervás y se abre paso entre abedules, castaños, olmos y alcornoques, protagonistas del jolgorio visual. En la cima de la ruta del Nevero –nace de La Garganta y llega hasta los 1.250 metros de altitud– permanece un cúmulo de nieve que antiguamente se vendía como hielo durante los meses de verano. Ciervos, jabalíes y algún que otro zorro se dejan ver por las rutas de la Chorrera y en el ascenso al Pinajarro .
Caminos históricos como la Vía de la Plata y la vías pecuarias de la Cañada Soriana Occidental también cumplen nuestro objetivo: disfrutar de la naturaleza vírgen y alejada del ruido urbano. La ruta circular de los Carboneros discurre desde Gargantilla hacia el valle del Jerte y llega hasta el puerto de Honduras. Por el camino nos cruzaremos con grandes cultivos de cerezos, ciruelos y con bosques de castaños, abedules y acebos.
Pimentón, uno de los mejores recuerdos gastronómicos del valle. © Visit Ambroz Tapeo en Aldeanueva del Camino El pimentón es un condimento básico en la cocina de esta parte de Extremadura. Los callos de cerdo con pimentón, el magro con pimientos, las patatas escabechás y la sopa dulce son platos típicos de las cocinas del Ambroz. En Aldeanueva del Camino existe una gran afición al tapeo, en sus tascas veremos quesos, zorongollo, gazpacho pobre, sopas de freje, chanfaina y landrillas. Por las calles de Aldeanueva del Camino caminaremos precisamente sobre la calzada romana que le da nombre y que se conserva en excelentes condiciones.
Vista aérea del palacio de Sotofermoso. © Visit Ambroz La Garganta y Abadía En la subida a la parte más alta del valle del Ambroz, por encima de los mil metros, se encuentra el pueblo de La Garganta , una pequeña localidad cuya tradición ganadera ha permitido conservar el Corral de los Lobos , una ingeniosa trampa lobera.
En el pueblo de Abadía , los jardines renacentistas del palacio de Sotofermoso , de los Duques de Alba –esos que tanto miedo infundieron a los niños de Flandes– ofrecieron reposo e inspiración a Garcilaso de la Vega y a Lope de Vega. El palacio cuenta además con un coqueto e interesante patio mudéjar.
El castaño del Corbiche fue declarado árbol singular. © Visit Ambroz Casas del Monte En los pies de Trasierra, nos acercamos al pueblo de Casas del Monte para iniciar un paseo que nos llevará hasta el histórico castaño del Corbiche , declarado árbol singular, y que cobijó a sus vecinos después de que las tropas napoleónicas quemaran la villa. Desde el pueblo podremos observar el pico de la Fuente del Moro y el Camocho, de 1.800 metros de altitud. Además, en Casas del Monte, se encuentra la villa romana de la Granjuela .
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