Un fin de semana en Coimbra te asegura visitas históricas, ambiente universitario, museos variopintos, fados, historias de amor y una rica gastronomía. Un viaje con amigas o en familia a esta ciudad portuguesa lo tiene todo para ser un sueño cumplido.
Patio de la Universidad de Coimbra. © RR/ TdP Coimbra es una ciudad que invita al paseo y al descubrimiento de forma individual porque en cada esquina se encuentra algo sorprendente. Lo primero que percibirás son los grandes desniveles entre la parte alta y la parte baja, por lo que conviene ir con zapatos planos o lo más cómodos posibles. Para que organices las visitas lo mejor posible, te contamos cuáles son algunos de sus atractivos.
📍Si te interesa hacer el primer paseo acompañada en un freetour , no tienes más que reservarlo y luego pagar lo que consideres.
Qué ver en Coimbra 1. Universidad de Coimbra y biblioteca Joanina Fundada en el siglo XIII, la Universidad de Coimbra es la más antigua de Portugal y una de las primeras de Europa. Incluso fue reconocida por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad. El conjunto de edificios que la alberga había sido la residencia de los primeros reyes de Portugal.
Las escaleras de la Universidad son el photocall favorito de los estudiantes. © Pepa García Merece la pena reservar al menos dos horas para esta visita porque hay que hacerla de forma guiada. Los lugares más interesantes son el enorme patio de las Escuelas, la sala dos Capelos (o de los birretes), la capilla de San Miguel (con órgano barroco) y la biblioteca Joanina . Esta última es absolutamente maravillosa, y cuenta con más de 300.000 obras de los siglos XVI a XVIII. Si subes a la torre, la panorámica con la ciudad a tus pies es impresionante.
El momento más importante del año para la comunidad estudiantil es la Queima das fitas (Quema de las cintas). No os podéis hacer una idea de la dimensión de esta fiesta.
La Biblioteca Joanina es una de las joyas de la Universidad de Coimbra. © Pepa García 2. Sé Velha o Catedral Vieja Integrada en el tejido urbano, apenas es perceptible hasta que la tienes casi encima. Externamente, da la impresión de solidez, y, de hecho, se clasifica dentro de la categoría de catedrales fortaleza (recuerda que la de Almería también pertenece a esta tipología). La Catedral Vieja, de estilo románico (dicen que es la mejor de Portugal en este estilo), fue edificada en el siglo XII. Si te fijas en su portada principal descubrirás influencia islámicas, y en la lateral, renacentistas. No pases de largo, y entra para admirar sus bonitos retablos.
Catedral Vieja de Coimbra. © Rogério Figueira 3. Jardines de Quinta das Lágrimas La visita de estos jardines, que ahora pertenecen al hotel de lujo Quinta das Lágrimas, está justificada porque fueron el escenario del amor de Pedro e Inés. Cuenta la leyenda que el infante Don Pedro se enamoró de la dama de compañía de su mujer, con quien mantenía una relación. Tras la muerte de su esposa, convivió con Inés en los Paços de Santa Clara, a pesar de no ser del agrado de su padre (Alfonso IV) ni del pueblo. Finalmente, su padre la mandó asesinar en 1355. Cuando Pedro subió al trono, años después, ordenó arrancarles el corazón a todos los que habían intervenido en el asesinato. Recordad que su apodo era ‘Pedro el Cruel’.
En los jardines de la Quinta das Lágrimas se pueden ver magníficas flores y zonas boscosas, y también varias fuentes: la Fonte dos Amores , cuya agua usaban los enamorados para enviarse mensajes; y la Fonte das Lágrimas , cuyo origen estaría en las lágrimas que vertió Inés cuando la mataban. Dice la leyenda, también, que la mancha roja de la roca (procedente de un alga) es la sangre de esta dama.
La Quinta das Lagrimas acoge ahora un hotel de lujo en Coimbra. 4. Museo Nacional Machado de Castro Este espacio es de visita obligada tanto por su historia y arquitectura como por las colecciones que alberga en su interior. Para empezar, el edificio donde se encuentra el Museo Nacional Machado de Castro es el antiguo palacio Episcopal (siglo XII), que fue construido sobre un criptopórtico romano. La colección del Museo Nacional Machado de Castro se puede clasificar en las siguientes categorías: arqueología, escultura, metales preciosos, joyería, pinturas y mobiliario. El nombre del museo recuerda a Joaquim Machado de Castro, un conocido escultor portugués. Si viajas con niños, pregunta por las visitas teatralizadas.
Museo Nacional Machado de Castro. © DGCP 5. Monasterio de Santa Clara a Velha Esta es otra visita que disfrutaréis mucho, seáis o no religiosas. Portugal tiene un don para mostrar sin artificios la herencia del pasado, lo hace en palacios, castillos y, también, en monasterios como este de Santa Clara. Este cenobio fue construido en el siglo XIV por orden de Isabel de Aragón (la Reina Santa). Como está situado cerca del río Mondego y se inundaba a menudo, se terminó construyendo otro monasterio y éste fue abandonado a mediados del siglo XVII. Ahora se puede pasear por lo que queda del mismo, y también visitar el centro de interpretación donde se exponen los objetos encontrados allí.
Monasterio de Santa Clara a Velha. © Centro de Portugal 6. Espectáculo de fado de Coimbra Si eres aficionada a la música folk, probablemente te gusten los fados e, incluso, conozcas algunos fadistas. Lo más seguro es que conozcas el fado de Lisboa, que no es exactamente igual que el de Coimbra. El origen del fado de Coimbra es incierto, hay quien dice que lo importaron estudiantes brasileños a mediados del siglo XIX, otros que fueron estudiantes lisboetas y que evolucionó en la ciudad; incluso hay quien lo relaciona con las canciones medievales de los trovadores.
Estas melodías de Coimbra, que rezuman melancolía, van acompañadas por los acordes de la guitarra portuguesa y son interpretadas por voces masculinas.
Fado de Coimbra. © Paulo Magalhaes Hay varios locales en la ciudad donde se puede acudir para ver una actuación en directo, pero, probablemente, ninguno tan especial como Á Capella (R. Corpo de Deus, 3000-180 Coimbra), que es un antiguo templo desacralizado. Suelen incluir una cena con los platos típicos (por supuesto, el bacalao está incluido). Otra opción, si no conseguís mesa allí es Fado ao Centro .
Visita los cafés históricos de Coimbra. © Pepa García 7. Pasteles y café, siempre en Portugal Los portugueses saben hacer muchas cosas bien, no hay duda, pero con el café y la repostería, lo bordan. Además, a un precio que nos parece un regalo a los españoles. Como te comentamos al inicio, Coimbra tiene muchos desniveles porque la ciudad se divide en la Ciudad Alta y en la Baja. La parte más llana o Baixa te la recomendamos por dos motivos: para ir de compras, ya que la mayor zona comercial se encuentra aquí, y para sentarte en alguno de sus preciosos cafés históricos donde puedas saborear un pastelito de Santa Clara o una arrufada (unos esponjosos panecillos de mantequilla). Y, si te gusta la mantequilla, no dejes de llevarte alguna tarrina como souvenir (la marca Mimosa es deliciosa y la puedes encontrar en cualquier supermercado).
📍¿Sabías que existe un tour gastronómico en Coimbra? No es especialmente barato pero merece la pena. Infórmate .
En el (©) Tivoli Coimbra también miman tu paladar. 8. Un paseo por la orilla del Mondego Y para bajar los pasteles, nada como un paseo por la ribera del río Mondego . Este camino permite ver una bonita panorámica de Coimbra, con su universidad en la colina, sus puentes (el de Santa Clara; el de la Reina Santa Isabel, firmado por Fernando Reis; y uno que nos encanta, el puente de Pedro e Inés, decorado con vidrios de colores. Encontrarás zonas ajardinadas y cafés donde tomar algo refrescante o para entrar en calor, en función de la estación que hayas escogido para el viaje. Si tienes tiempo, te puedes acercar también al magnífico Jardín Botánico (Calçada Martim de Freitas), que fue diseñado en estilo italiano por orden del marqués de Pombal; y a la Plaza del Comercio , donde se encuentra la bonita iglesia de Santiago.
📍Paseo en barco por el río desde 8 euros. Reserva tu entrada .
Parque verde del Mondego y puente de Pedro e Inés. © Centro de Portugal 9. Portugal dos Pequenitos Hemos dejado para el final esta visita porque puede que no os haga gracia si no vais con niños. ¿Por qué? Muy sencillo, porque es un parque donde se resume la arquitectura portuguesa en tamaño infantil. Esta fantástica idea se le ocurrió al profesor y médico Bissaya Barreto en 1940. El arquitecto encargado de llevar a cabo Portugal dos Pequenitos fue Cassiano Branco, quien intentó ofrecer “un retrato vivo de la portugalidad y de la presencia portuguesa en el mundo”. Es un placer pasear, o recorrer en trenecito, las diversas regiones portuguesas conociendo sus casas tradicionales y monumentos más relevantes. Por supuesto, en Madeira hay una escultura de Lego que representa a Cristiano Ronaldo.
Los pequeños se lo pasan en grande, entrando y saliendo de templos, castillos y viviendas de este país de Liliput.
En Portugal dos Pequenitos se reproduce la arquitectura del país y de sus colonias. 10. Si viajas en familia… Si has decidido viajar con niños y buscas qué hacer en Coimbra con ellos, te interesa saber que además de Portugal dos Pequenitos existen otros museos. El primero, el Museo de la Ciencia , que pertenece a la propia universidad y que te brinda una excelente oportunidad de ver material científico y de laboratorio. Tiene visitas adaptadas a todas las edades. Y otro que nos encantó, y que es perfecto para niños de primaria o infantil, es el Exploratorio Ciencia Viva Coimbra . Es un complejo de 2.500 m2, donde los visitantes pueden interactuar para aprender sobre el cuerpo humano, el entorno, los planetas… Suele haber proyecciones en su sala de cine y actividades guiadas. Si vas con niños continua el viaje por la Región Centro de Portugal en este artículo de 9 planes en familia en el Centro de Portugal .
Dionísio Ferreira, chef del restaurante Se7e, se muestra tan natural como su cocina basada en las tradiciones portuguesas. © Pepa García Guía de Coimbra Cómo llegar a Coimbra
Coimbra está situada en la región centro de Portugal, entre Lisboa –a 198 km– y Oporto –143 km– por lo que, dependiendo de tu procedencia, te puede interesa volar hasta una de estas ciudades, o llevar tu propio vehículo.
Si llegas a Lisboa, una vez allí puedes tomar un autobús de la empresa Rede Expressos , que te deja en Coimbra en unas dos horas y media.
Dónde dormir en Coimbra.
• Tivoli Coimbra . Este establecimiento, situado en la animada zona de la Baixa, cuenta con 100 habitaciones de diversas categorías. Estas se adaptan a las distintas necesidades de su clientela (1 executive suite, 10 deluxe, 5 superiores familiares y 75 superiores). No desaproveches la oportunidad de tomar un rico café en su Simone Coffee Shop . Y si llegas muy cansada tras un día intenso por Coimbra, puedes reservar un masaje que te ayude a recuperar la vitalidad. Rua Joao Machado, 4/5, 3000-226), Coimbra.
Recupera fuerzas en el © Tivoli Coimbra. Dónde comer en Coimbra
Restaurante Se7e . Este local es idóneo para saborear la comida portuguesa tradicional pero con toque de autor. Prueba sus huevos escalfados con chorizo, el bacalao confitado y el cordero. Ofrece también una extensa carta de vinos. Rua Dr. Martins de Carvalho, nº 10 . Tel. 00351 239 060 065
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