Aún quedan escapadas cercanas y sorprendentes, como la Ruta del Vino de la Sierra de Francia, donde se combinan paisajes, pueblos encantadores, rutas naturales, buena gastronomía, y ¡cómo no! un buen número de bodegas. Este es uno de los planes con amigas en la provincia de Salamanca que no podrás rechazar. Mogarraz forma parte de la Ruta del Vino de la Sierra de Francia. © Pepa G. Si no eres de Castilla y León o muy amante de los vinos, puede que te cueste ubicar dónde se encuentra la Ruta del Vino de la Sierra de Francia . Es más, incluso es posible que desconozcas que la Sierra de Francia es uno de los planes con amigas en la provincia de Salamanca más completos que se pueda imaginar.
¿Por qué? Porque es un territorio poco transitado por el turismo, lo que aporta una dosis extra de emoción. Porque si te gustan las rutas naturales encontrarás montañas, bosques, sendas, ríos, pozas y decenas de lugares donde el verde es el protagonista. Porque si eres de buen comer disfrutarás de productos y recetas llenas de historia y autenticidad. Porque los pueblos parecen pequeños milagros que surgen entre la exuberancia del paisaje. Y, también, porque este territorio está regado por grandes vinos elaborados con la variedad Rufete, que nos habla de pasado y presente, de frescura y de pasión por la tierra. Y aún quedarían argumentos para elegirlo como destino en cualquier momento del año.
Viñedos, pueblos, gastronomía y más en la Ruta del Vino de la Sierra de Francia. © Pepa G. «La Ruta del Vino de la Sierra de Francia fue galardonada con el Premio al Mejor Destino Enoturístico Responsable y Sostenible en 2020/1» Para apreciar los distintos matices de la Ruta del Vino de la Sierra de Francia, una de las 33 que forman parte de las Rutas del Vino de España creadas por ACEVIN, el mayor referente enoturístico del país, debes organizarte bien. Elige visitas variadas y deja tiempo a la improvisación. Y si no te quieres complicar, existe una plataforma de experiencias enoturísticas sostenibles donde reservar visitas, talleres o rutas de hasta tres días. Más sencillo, imposible.
10 planes en la Ruta del Vino de la Sierra de Francia Estas diez propuestas no pueden recoger todas las opciones de la ruta, ya que está integrada por 22 municipios con bodegas, restaurantes, alojamientos, etc., pero es una buena muestra para hacerte una idea. Encontrarás desde paseos por pueblos encantadores hasta senderos con mucho arte. Y, por supuesto, con el vino siempre presente de un modo u otro. Un vino elaborado con la variedad autóctona Rufete y que forma parte de la DOP Sierra de Salamanca , creada en 2010 para proteger su singularidad.
Retratos en Mogarraz. © P.G. 1. Mogarraz, mucho más que retratos Es uno de los pueblos más conocidos de Salamanca, también de los más sorprendentes y de los que tienes que incluir en tus planes con amigas en la Sierra de Francia. Sus casas con tramoneras y los apellidos de los vecinos (Maíllo, Gascón), heredados de la repoblación francesa, son parte de su factor diferencial. Sin embargo, lo que más llama la atención nada más entrar en su casco urbano son los retratos que cuelgan de sus fachadas.
En cada vivienda lucen dos, tres, cuatro, ocho o incluso más imágenes de los vecinos. La idea inicial era colocar los 388 retratos de la personas que vivían allí en 1967, y que habían sido fotografiadas para renovar el DNI por un vecino, un antiguo militar que disponía de cámara. Al morir éste, los negativos fueron encontrados por su viuda que se los entregó a Florencio Maíllo, artista local y profesor de la Universidad de Salamanca. Maíllo decidió pintarlos y colocarlos en sus casas. ¿Cuántos retratos hay ahora? Nada menos que 809, y parece que las peticiones de los vecinos aún no han parado….
Restaurante Mirasierra y bodega La Zorra. © Pepa G. En Mogarraz también encontrarás buena cocina y vinos Pero a Mogarraz (artículo completo en Mogarraz se retrata ) no sólo se acude para admirar este museo al aire libre, pasear por “Uno de los pueblos más bonitos de España”, o empaparse de cultura en su Museo Casa de las Artesanías, sino que también se va a comer de maravilla. El Restaurante Mirasierra se ha convertido en uno de los lugares de referencia y motivo justificado para desplazarse los kilómetros que hagan falta. Su propietario –y cocinero– se declara un gran defensor de la cocina y de los productos locales, pero incorporando algún toque innovador. Sus patatas meneás y sus chuletas de morucha son espectaculares. Justo detrás del restaurante se sitúa la Bodega La Zorra , un espacio donde organizan visitas guiadas, hacen catas y degustaciones. Su tienda es una gran tentación, estás avisada.
Fernando Maíllo, propietario de Bodega Cámbrico. © Pepa G. 2. Paseo por los viñedos de Bodega Cámbrico Seguimos los planes en la Ruta del Vino de la Sierra de Francia con una copa en la mano. Este segundo plan nos lleva a visitar los viñedos y la bodega Cámbrico , en Villanueva del Conde. Conecta tu GPS para llegar porque merece mucho la pena realizar la visita guiada entre estas vides sembradas en bancales y que brindan bonitas panorámicas de este entorno verde y montañoso. Desde el año 2000, nos contó Fernando Maíllo, cultivan de forma ecológica la variedad Rufete en estos viñedos centenarios. El paseo se complementa con la visita a la bodega, de estética moderna (fue edificada en 2006), y la cata de algunos de sus vinos en una terraza donde los atardeceres se subliman. Allí mismo podrás comprar un vino para llevarte a casa, ¿qué tal un Cámbrico Rufete?
Cata de vinos en Bodega Cámbrico. © Pepa G. 3. Ruta senderista ‘Caminos de arte en la naturaleza’ No hay que irse muy lejos para iniciar otro de los planes con amigas en la Sierra de Francia . De hecho, el ‘Camino de los Prodigios ’ –que forma parte de los ‘Caminos de arte en la naturaleza’– se puede comenzar junto a la escalera de entrada de la bodega Cámbrico. Esta ruta fue diseñada y comisariada por Juanvi Sánchez y otros profesionales de A Mano Cultura .
El sendero completo transcurre entre Miranda del Castañar y Villanueva del Conde (10,2 km, unas 4 horas), pero la versión exprés de unos 2 kilómetros permite disfrutar del entorno, árboles, sonidos, vistas… y de las obras de arte que salpican el sendero. La caminata se convierte en un agradable juego en el que localizar piezas artísticas mediante acertijos. Sin duda, su nombre está justificado. Nuestro consejo es ir con calma y llevar un pequeño pícnic para degustar junto al río o en cualquier recodo que se prefiera.
Camino de los Prodigios. © Pepa G. En la población de Villanueva del Conde continúa visitando su casco histórico con la ermita del Humilladero, la iglesia de San Fabián y San Sebastián, los pilares… Sin olvidar el arte urbano con el que Pablo S. Herrero ilumina alguno de sus muros con siluetas de árboles (también dentro del Camino de los Prodigios).
Calles de Miranda del Castañar. © Pepa García 4. Miranda del Castañar Si hicieras la anterior ruta completa llegarías a Miranda del Castañar, otro de los pueblos que destacan en la Ruta del Vino de la Sierra de Francia. Ha sido declarado Conjunto Histórico y obsequia con un viaje al pasado nada más divisar la torre del Homenaje de su castillo, y cruzar las murallas en dirección a la sólida silueta de su iglesia. El conjunto está marcado por viviendas con tramoneras y fachadas esgrafiadas, casas palacio y alguna que otra leyenda. Para conocer al detalle sus secretos basta acudir al Museo-Bodega La Muralla , donde Gerardo estará encantado de acompañarte para conocerlo y terminar visitando la antigua bodega del siglo XVIII en la que Mª Ángeles ofrece ahora delicatesen variadas y artesanías locales. Si tienes algún regalo pendiente, ya sabes.
Y para tapear o comer, una recomendación muy especial: la Taberna Albada , donde Mónica y Félix, dos madrileños que se enamoraron de la Sierra de Francia, te ofrecen ricas recetas basadas en los productos locales y preparadas con todo mimo.
Paseo entre olivos y cata de aceites en Soleae. © Pepa G. 5. Cata de aceite en Soleae Seguimos los planes con amigas en la Sierra de Francia en Herguijuela de la Sierra , la población donde se sitúa Soleae , una empresa que tiene sus propias fincas de olivos y se dedica a la elaboración de aceite de oliva. Los premios que lucen colgados de su sede dan fe del buen trabajo de dos emprendedores, Jesús Ángel Blanco y María Hernández, que pusieron el proyecto en marcha inicialmente con más corazón que conocimiento del negocio, como nos contaron. Su historia comenzó en 2008, y desde entonces sus valores se han ido asentando, con una firme creencia en la agricultura tradicional, el desarrollo rural sostenible y la producción de alimentos saludables.
Hoy día nos brindan una experiencia oleoturística, en la que se visitan los olivos, y se hacen catas para conocer de cerca todo el complejo mundo del aceite de oliva. También puedes adquirir sus aceites a distancia, pero nuestra recomendación es que vivas la experiencia completa.
Piscina natural y plato de garbanzos con almejas de El Pipero. © P.G. 6. Puentes del Alagón y comida en El Pipero Las piscinas naturales, pozas y cursos de ríos salpican el entorno del Parque Natural Las Batuecas- Sierra de Francia regalando refrescantes alegrías en verano y postales panorámicas todo el año. En uno de estos entornos idílicos se encuentra el restaurante El Pipero , donde no sólo se degusta la cocina serrana más auténtica sino que es posible disfrutar de su piscina natural de forma gratuita. Entre los guisos que te conviene considerar (déjate aconsejar por Agustín, que por algo su familia lleva más de cuarenta años al frente) son las patatas meneás, los garbanzos con almejas, el cabrito cuchifrito, la trucha escabechada o la carrillera con Rufete. Y si te queda hueco para tomar un postre, el arroz con leche, el flan casero o la crema de fresas están exquisitas. El restaurante está a dos kilómetros de Santibáñez de la Sierra.
Joaquín Berrocal dentro de uno de los lagares rupestres que ha encontrado. © P.G. 7. Lagares rupestres San Esteban de la Sierra Para hacer bien el séptimo plan con amigas en la Ruta del Vino de la Sierra de Francia te sugerimos que lleves calzado deportivo y pantalón largo porque tendrás que caminar, no mucho pero a veces entre matorrales. La experiencia lo merece.
Aunque el municipio de San Esteban de la Sierra guarde varias sorpresas, hay una que merece un plan especial: los 126 lagares rupestres descubiertos en el municipio . No se descarta que existan muchos otros. Este hallazgo se lo debemos a Joaquín Berrocal, un gran estudioso y “coleccionista” de lagares que ha dedicado los últimos años de su vida a localizarlos y a indagar sobre su origen. La pasión que demuestra en las visitas guiadas de la Ruta circular de los Lagares rupestres es casi tan enriquecedora como estos lagares, hondonadas de grandes dimensiones sobre la roca donde se realizaba el vino. Si te interesa la experiencia completa, debes saber que hay opciones con cata de vinos y degustación de ibéricos.
Bodega y viñedos de El Abuelo Flores. © Pepa G. 8. Atardecer en los viñedos de El Abuelo Flores Esta nueva propuesta se desarrolla también en el entorno de San Esteban de la Sierra y complementa perfectamente a la anterior. Tras la visita a los lagares rupestres y aún con la sorpresa en la retina te recomendamos visitar la bodega El Abuelo Flores donde la tradición no se remonta tan atrás, a pesar de que las riendas las lleva ya una quinta generación. Esta pequeña bodega familiar exhala ilusión y juventud a partes iguales. Los nietos del abuelo Flores (Juan Mari y Ana) son los que se han empeñado en situar la bodega al nivel de las mejores de la provincia, y de hecho ya forman parte de la DOP Sierra de Salamanca y han cosechado más de un premio. Uno de sus primeros vinos se llama “Ilusión”, como no podía ser de otra manera.
Una experiencia gratificante es visitar al atardecer, copa en mano, sus viñedos, y pasear entre las vides acompañados de los recuerdos de los Flores. Y, para terminar el día en otro lugar especial, hay que dirigirse al restaurante La Botica donde el arte nace en la cocina para preparar suculentos platos y guisos con sabor a la Ruta del Vino Sierra de Francia. No declines probar sus carrilleras o su pulpo a la brasa.
Restaurante Castillo de Montemayor del Río. © Pepa G. 9. Montemayor del Río Al llegar a Montemayor del Río, casi nos despedimos de estos planes con amigas en la Sierra de Francia pero lo hacemos dándonos un nuevo homenaje y sintiéndonos reinas en nuestro propio castillo, el de San Vicente. Esta población brinda un paseo agradable entre plazoletas adornadas de terrazas y gente sonriente, una judería y talleres de cestería o repostería. Su patrimonio se descubre acompañado del sonido de las fuentes que ponen la banda sonora a la Plaza Mayor, a la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción y al mirador de la Villa.
Rodeada de castaños y de robles, esta localidad es el epicentro perfecto para emprender rutas senderistas. Y si no eres de caminar, al menos debes recorrer los metros que llevan hasta el puente medieval que cruza el río Cuerpo de Hombre y que observa en verano cómo los vecinos entran y salen del agua alegremente para refrescarse.
Vistas desde el castillo de Montemayor del Río. © Pepa G. La visita obligatoria aquí es el castillo de San Vicente , donde hacer una visita guiada, subir a las almenas y terminar comiendo en el restaurante Castillo de Montemayor del Río , recientemente galardonado con un Solete Repsol. De los fogones de Santiago salen platos únicos presentes en su carta desde 2017 como las Flores de calabacín ‘orly’ rellenas de crema de farinato ‘Hergaer’ con miel y polen , y las Patatas revolconas, carpaccio de pulpo y torreznos de panceta ibérica curada . Y también otros más recientes como la Terrina de foie rellena de cerezas estofadas al Rufete .
Un brindis con ‘Cuarta Generación’ en el meandro El Melero. © Pepa García 10. Mirador del meandro El Melero Hemos dejado el meandro El Melero para el selfi final del viaje. La curva más espectacular del río Alagón está situada en el límite natural entre Salamanca y Cáceres, repartiéndose ambas provincias el protagonismo ya que geográficamente es salmantino –porque está en Sotoserrano – pero las mejores vistas se obtienen desde tierras extremeñas, en Riomalo de Abajo. Si brindas desde el mirador de la Antigua seguro que se cumplen todos tus deseos. Esto último nos lo acabamos de inventar, pero… ¿por qué no instaurar una nueva tradición?
Ruta del Vino Sierra de Francia | Guía Etheria Cómo llegar y moverse Una buena opción es llegar en coche desde tu lugar de residencia, pero también puedes hacerlo en tren hasta Salamanca capital y alquilar allí un vehículo para moverte por el Parque Natural Las Batuecas-Sierra de Francia.
*Opción súper cómoda. Contratar las experiencias de la Ruta del Vino de la Sierra de Francia.
Dónde dormir Hotel Porta Coeli. Un hotel rural con amplias habitaciones, hermosas vistas y un servicio de altura. San Martín del Castañar. Desde unos 80 €/hab. doble.
Casas-rurales Francia-Quilamas . Apartamentos confortables para parejas o familias en Santibáñez de la Sierra. Ideales para descubrir la comarca.
Qué comprar Las compras en la Sierra de Francia deben ser artesanas o gastronómicas. Algunas que te van a encantar son los jamones y embutidos de Cárnicas Madroñal, de Labrador , Ibéricos El Valle , Jamones Parra López y de Calama . En La Tahona de Miranda también encontrarás panes, hornazos, magdalenas y perrunillas (Avda. de la Constitución, 38. Miranda del Castañar). Y aunque ya te hemos nombrado algunas bodegas, toma nota: Don Celestino, Tiriñuelo, Cuarta Generación, Rochal, La Zorra, Cámbrico y El Abuelo Flores.
Más información Rutas del Vino de España .
Ruta del Vino Sierra de Francia .
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