Las que estamos sometidas a los rigores del invierno durante muchos meses, porque vivimos en el centro de la península, vemos las islas Canarias como una vía de escape en cuanto se presenta la ocasión. Esta vez nos vamos a Gran Canaria pero no para descubrir su universo marino, sino para caminar por el escarpado interior de la isla.
Paisaje de Gran Canaria. Millones de años de intensa actividad volcánica han modelado Gran Canaria dotándola de esos paisajes quemados y singulares que son tan característicos. Las últimas erupciones —hará entre 3.000 y 1.000 años— se produjeron en el Norte y centro de la isla , por lo que si al hacer senderismo en Gran Canaria queremos pisar volcanes tendremos que acercarnos a esta parte del mapa. De hecho, uno de los primeros destinos turísticos en Gran Canaria a finales del siglo XIX fue, precisamente un volcán, Bandama , cuya caldera extinta es una de las mayores del territorio grancanario.
Para ver el paisaje volcánico de Gran Canaria desde todas las perspectivas posibles podemos acercarnos primero hasta el mirador del Pico de Bandama situado a 574 metros de altura. Una vez vista desde arriba, toca reconocer la caldera sobre el terreno. Para ello tendremos dos opciones: recorrer su perímetro (3,4 km sin apenas pendiente) o bajar hasta el fondo del cono volcánico (también 3 km pero con un desnivel de 382 metros). Por cierto, en Bandama no solo encontramos ceniza y escorias volcánicas; abundan aquí algunas de las especies endémicas del archipiélago como el tajinaste blanco (Echium decaisnei ) o el incienso canario (Artemisa canariensis ) además del exuberante bosque termófilo (con sus acebuches, lentiscos y almácigos) ¡e incluso huertas! que pueblan el fondo de la caldera.
La caldera del extinto volcán Bandama es una de las mayores de Gran Canaria. Las cumbres más altas Para seguir con los paisajes volcánicos, podemos acercarnos hasta la Cruz de Tejeda , ese alto que fue siempre lugar de paso y de encuentro —ya en el siglo XVII unía los Caminos Reales— y que hoy es ruta recurrente para todos los que visitan las cumbres más altas de Gran Canaria.
Desde la Cruz de Tejeda, que por cierto marca aproximadamente el centro geográfico de la isla, hay numerosos caminos para hacer senderismo en Gran Canaria, que discurren entre pinos canarios y sobre suelo de picón, con los roques Nublo y Bentayga como permanente telón de fondo. Algunos de estos caminos son la Ruta 10 , que va de Artenara a Cruz de Tejeda pasando por la Degollada de Las Palomas (8,2 km); la Ruta 11 , que va de Cruz de Tejeda al Cruce del Aserrador pasando por el Roque Nublo (11 km); o la Ruta 15 que desciende desde la Degollada Becerra hasta pueblo de Tejeda (6,2 km).
La población de Tejeda es un rincón perfecto para reponerse de la actividad física. Camino de Santiago en Gran Canaria ¡Ah! y un secreto: aunque muy poca gente lo sabe, existe un Camino de Santiago perfecto para hacer senderismo en Gran Canaria desde Maspalomas hasta la parroquia de Santiago de los Caballeros, en Gáldar. Aunque lógicamente no se llega a Santiago de Compostela, cubrir a pie esta distancia da derecho a obtener el jubileo compostelano igual que si se hubiera andado alguno de los caminos peninsulares hasta el sepulcro del apóstol. Si nos animamos, son tres etapas y un total de 72 kilómetros.
El caserío de Temises, al fondo, ha sido reconocido por su valor arquitectónico rural. Baños de bosque con Juanate Gil En Artenara tiene su estudio la coach Juanate Gil, la mayor experta de la isla en shinrin-yoku o baños de bosque. Esta terapia antiestrés que nació en Japón en los años 80, consiste en adentrarse en el bosque para conectar con la naturaleza y con nosotras mismas. Es una técnica de relajación que combina el contacto físico con diversos elementos (troncos, hojarasca, andar descalzos..) con técnicas de meditación, yoga y respiración consciente. En Japón y en Corea —donde hace furor esta práctica— han demostrado también los efectos terapéuticos de los fitomicidas, que son las sustancias volátiles que segregan los árboles y las plantas.
Dónde alojarse en Gran Canaria La Hacienda del Buen Suceso (www.haciendabuensuceso.com) es un hotel rural en una antigua hacienda platanera que sigue conservando su arquitectura colonial y la finca agrícola a su alrededor. Las habitaciones combinan el encanto de la casona con una decoración vanguardista.
Hotel Las Calas (www.hotelrurallascalas.com). Esta casa solariega del siglo XIX, reformada y con mobiliario de la época, fue la residencia de verano de una familia noble canaria. Ofrece servicios para los senderistas, como alquiler de bastones o preparación de picnics.
En el restaurante Tagoror (www.restaurantetagoror.com), ubicado en una cueva excavada a mano durante casi once años, se puede degustar cocina canaria tradicional. Se encuentra donde acaba la carretera del barranco de Guayadeque.
Más información en Turismo de Gran Canaria (www.grancanaria.com).
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