Un safari en Botsuana puede cambiar tu concepción del viaje y de la naturaleza africana, incluso marcar un antes y un después en tu vida. Te animamos a explorar las orillas del río Chobe mientras despierta tu naturaleza más aventurera.
Bufalo de agua. Hacer un safari es una experiencia que hay que vivir al menos una vez en la vida. Si se quiere hacer de la forma más auténtica, en parques naturales menos masificados y viendo a los grandes animales muy de cerca, Botsuana será una excelente elección. Este país combina las grandes praderas con el maravilloso río Chobe, que aporta al viaje los safaris por agua y permite ver casi cara a cara a los temidos hipopótamos. Te damos diez razones de mucho peso para que pongas en tu agenda un safari por Botsuana.
1. Un safari en Botsuana a tu propio ritmo A bordo de tu todoterreno tendrás que detenerte con frecuencia allá donde el río Chobe adquiere su denominación, tras fluir desde las tierras altas de Angola (a través de Namibia) cambiando varias veces de curso y nombre. No es porque encuentres semáforos en rojo sino por la extraordinaria riqueza de fauna que encontrarás a tu paso. Sobre todo elefantes, que se alimentan de la abundante vegetación, pero también de cebras, búfalos cafre, jirafas, antílopes, impalas y leones. No verás muchos vehículos –por la regulación de acceso del parque nacional– así que podrás detenerte con calma para admirar a los animales, dejar pasar las manadas o deleitarte una y otra vez haciéndote un selfi para sentirte protagonista de una película en clave africana.
Mini crucero por el río Chobe. 2. Navegar por el río Que el río se remanse al alcanzar el norte de esta república africana e inunde grandes áreas del parque –es la tercera reserva natural más extensa del país– invita a conocerlo de cerca gracias a algunos barcos que funcionan como alojamiento y que se prestan a recorrerlo en un minicrucero de varios días. Embarcarás en la ciudad de Kasane , en las cuatro esquinas de Africa, como se conoce al territorio de Botsuana donde se junta con otros tres países (Zimbabue, Namibia y Zambia). Navegarás por aguas internacionales viviendo con vistas al río y, como mínimo, en este safari en Botsuana dormirás dos noches sintiéndote la reina de África.
Elefantes africanos bañándose en el río. 3. Seguir la migración de los elefantes Estás en el paraíso de los elefantes, y en este safari en Botsuana no pueden faltar. Este parque concentra la mayor población mundial del gigante africano. Son migratorios, ya que se desplazan alrededor de 200 kilómetros entre los ríos Chobe y Linyanti. Mientras en gran parte de África la sequía puede matar a los elefantes, no ocurre así en el Parque Nacional de Chobe. Sus charcas o pans se convierten en su refugio durante la estación seca.
Cuando alcancen la orilla, oirás su trompeteo que es como se comunican los elefantes. Mejor que no te pillen a pie sino sobre alguna de las barcas que cada día recorren el río en busca de la fauna que lo frecuenta para beber. Al nordeste, en Serondela, los verás disfrutando de su baño en su rincón preferido del río, tomando sales minerales en los taludes del río o revolcándose en el barro para cuidar su piel y protegerla así de los insectos.
Los hipopótamos se concentran en grandes grupos junto al río Chobe. 4. Ver hipopótamos (de lejos) Los meses secos del invierno austral son los mejores para ver las grandes concentraciones de fauna que acuden a la orilla del río a saciar su sed. Aunque los protagonistas, en cualquier momento del año, son los hipopótamos por su hábitos semiacuáticos –permanecen casi sumergidos para evitar que el sol dañe su piel–. Se concentran en grandes grupos de machos acompañados de hasta 30 hembras y jóvenes ejemplares para repartirse territorialmente el río. Sólo con la noche abandonan en solitario el agua para alimentarse de hierba. Aun así no te fíes de este pariente de las ballenas porque estás ante el animal más feroz del continente africano. Aunque tiene patas cortas, puede correr tan rápido como un ser humano, y su boca ¡es enorme!
Amanecer en Bostsuana. 5. Amaneceres que enamoran A pesar de la abundante vida que frecuenta el río no podrás dejar de sentirte cautivada durante el safari en Botsuana por un amanecer o atardecer a orillas del Chobe. Da lo mismo que estés a bordo de un crucero en barco, en un lodge de los instalados en sus orillas o en un aventurero safari móvil como los que organiza Mopane Game Safaris . Después de haber contemplado esos primeros o últimos rayos de sol no querrás perderte ni un solo de esos momentos únicos del color africano.
Podrás contemplar 450 especies de aves. 6. Convertirse en una birdwatcher Son tantas las aves que reúne el parque nacional, hasta 450 especies , que sentirás unas ganas irresistibles de conocerlas por su nombre cuando descubras la belleza del pato aguja africano secando sus alas al viento después de una inmersión fluvial. Reconocerás por su llamada, gran tamaño y habilidad pescadora al pigargo vocinglero . Te encantará el intenso colorido de los abejarucos haciendo sus nidos en los bancos de arena. Moviéndose ágil sobre el agua divisarás al martín pescador entre los canales e islas del río y, en las orillas, a las delicadas aves limícolas que han hecho largas migraciones huyendo del frío boreal para disfrutar del Chobe.
El papiro es una de las plantas que se pueden observar en el viaje a Bostsuana. 7. Árboles y plantas para alucinar Cerca del agua es donde contemplarás no solo la mayor variedad de fauna sino de vegetación que, como los papiros , dependen de su abundancia para sobrevivir. Mecidos por el viento rodean el área pantanosa de Linyanti, al norte de Savuti, donde divisarás en un ambiente relajado una gran reunión de fauna. Dejando la orilla, más hacia el interior ribereño y antes de perdernos en la llanura arenosa salpicada de colinas de origen volcánico que cubre gran parte del parque, disfrutarás entre arbustos, palmeras ilala y grandes árboles de mopane y acacias . Pero no olvides que no estás en un jardín botánico sino en un safari en Botsuana, y que por aquí suelen acechar depredadores como el león, guepardo, hiena, chacal, zorro, caracal o leopardo pendientes de sus presas en camino hacia el agua.
Es curioso observar el comportamiento de los babuinos. 8. Seguir las señales de los babuinos Sus gestos familiares de primates hacen a los babuinos muy simpáticos de contemplar mientras permanecen cercanos a la orilla del Chobe. Desde los juegos ajenos al peligro de los pequeños de la manada, siempre bajo la atenta mirada de algún adulto, a la fiera mirada territorial de los machos. Los caminos que utilizan para cruzar el río no dejan de ofrecer momentos de observación fascinantes durante nuestros paseos por el río. Sus gritos de alarma avisan de la llegada de algún visitante salvaje a la orilla, con suerte un leopardo o tal vez otro macho que se atreve a acercarse al grupo, la pelea está servida y con ello un espectáculo animal ante nuestros ojos.
Safari en el Parque Nacional de Chobe. 9. Naturaleza pura Recorriendo el río Chobe comprobarás que lo que le convierte en un parque nacional tan especial es la facilidad con la que puedes disfrutar de África y su fauna realizando al mismo tiempo una amplia variedad de actividades en el mismo lugar. Ya sea por vía terrestre, sobre un vehículo todoterreno, o en barco, surcando las aguas del río, caminando o desde la veranda de tu alojamiento disfrutarás de la esencia de Africa. Estás en el mejor lugar del continente donde observar a la fauna muy de cerca.
Los predadores atravesando la llanura se pondrán a tu alcance camino de la orilla, los atardeceres en el río te rodearán de luces maravillosas y avistamientos de aves insospechados. Los elefantes cruzando el río o los hipopótamos y cocodrilos te regalarán recuerdos imborrables. Y, si quieres disfrutar de la riqueza humana de la región, atraviesa el río en la barca tradicional de madera o mokoro y camina hasta un pueblo tribal de la orilla namibia del río.
Lodge en Botsuana. 10. Relax en un lodge Después de vivir una emocionante jornada en busca de la fauna africana te espera toda la comodidad de un hotel de lujo al hospedarte en lodges y hoteles en plena naturaleza , en las proximidades del parque. Ubicados en las orillas del río, disfrutan de buenas vistas del Chobe, con terrazas y piscina al aire libre para relajarte. Muchos disponen de alojamiento en cabañas individuales mientras que dejan en amplios espacios comunes, el restaurante y áreas de estar; otros cuentan con tiendas de campaña fijas equipadas de lujo a modo de habitación de hotel y algunos disponen de la posibilidad más económica de acampar por nuestra cuenta. Destacan por su compromiso en favor de la conservación del parque y, por la noche, ofrecen una excitante vivencia con los sonidos de la fauna africana a nuestro alrededor.
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