Una de las mejores opciones de alojamiento para una escapada romántica es un riad en Marrakech, y si lo haces en el Riad Belle Epoque le sumas un espacio exclusivo donde cada rincón ha sido cuidado con mimo. Te sentirás como en un capítulo de Las mil y una noches .
Patio interior del Riad Belle Epoque. La medina de Marrakech está llena de secretos bien guardados entre sus estrechas e intrincadas callejuelas. Uno de ellos es el Riad Belle Epoque, que parece un lugar modesto y casi oculto hasta que, al abrir la puerta, aparece un rincón de paz donde escuchar el murmullo de las fuentes y disfrutar de los aromas de su jardín.
Su nombre no ha sido elegido al azar, ya que este pequeño riad se ha propuesto reflejar el gusto por la vida y el placer de la Belle Époque . Esto se refleja en su decoración (que mezcla piezas de este estilo con otras tradicionales de la cultura marroquí) y en conseguir un edén perfecto para el descanso y el disfrute de los sentidos.
Detalles de decoración del Riad Belle Epoque. Los dueños del hotel, una pareja española, han puesto todo su empeño en combinar la dirección profesional bajo estándares españoles con la colaboración de un equipo marroquí que aporta su calidad humana y conocimiento de la forma de vida y la gastronomía del país. Un tándem perfecto para conseguir que los huéspedes se sientan como en casa.
Sólo siete habitaciones Uno de los alicientes del hotel es disfrutar de una de sus siete habitaciones. Todas son diferentes y reciben el nombre de una mujer que refleja el estilo de la Belle Époque : Coco Chanel, Isadora Duncan, Mata Hari, La Bella Otero, Karen Blixen, Anita Delgado y Josephine Baker.
Habitación Cocó Chanel. En su decoración se combina el estilo Art Decó con los objetos tradicionales marroquíes. Como es habitual en los riads, las habitaciones están orientadas hacia el patio interior , para alejarse del bullicio de la ciudad antigua, y guardan una cierta penumbra para mantener una temperatura agradable en los cálidos días estivales de Marrakech (aunque todas tienen aire acondicionado). Además, disponen de conexión wifi y todo tipo de amenities en el baño.
Decoración marroquí en uno de los baños. Servicios del hotel En el Riad Belle Epoque todo parece estar diseñado para el disfrute y el descanso. Podrás pasar un rato de paz absoluta en su patio-jardín frente a la piscina , bien en su salón con chimenea bien en la zona chill out . Y para contemplar las bonitas vistas de los tejados de Marrakech, nada mejor que su terraza .
Terraza del Riad. Además, disfrutaras de unos exquisitos desayunos realizados con productos locales y de la mejor gastronomía marroquí en forma de cuscús, tajin o brochetas. Ten en cuenta que si quieres comer o cenar en el hotel tienes que avisar con antelación para que lo tengan todo preparado.
La ciudad de Marrakech Pasar un fin de semana en Marrakech es perfecto y cómodo, ya que desde España hay varias ciudades con vuelos directos que en poco más de dos horas te llevan a esta bella ciudad africana. Alojarse en el riad Belle Epoque, en la zona de la Medina, tiene la ventaja de estar inmersa en su lugar más auténtico, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1985. Aquí podrás perderte por sus callejuelas entre tiendas de moda, muebles tradicionales, babuchas, artesanía, especias… Un sinfín de colores y olores que te llevarán a la plaza de Jemaa el Fna , centro de la vida de la ciudad. No dejes de tomar un café o un té en alguna de sus terrazas y deleitarte con el trasiego de comerciantes, encantadores de serpientes y curiosos.
Minarete de la mezquita de la Koutoubia. Otras visitas imprescindibles en la ciudad son el Jardín Majorelle (que fue propiedad de Ives Saint Laurent) donde se sitúa también el Museo de Arte Islámico, las Tumbas Saadíes (del siglo XVI), la mezquita Koutoubia (cuyo minarete es el edificio más alto de la ciudad), los jardines de la Menara y el palacio de El Badi .
Fotos: © Rusticae
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