A las islas Lofoten, consideradas entre las islas más bonitas del mundo, se puede viajar por libre de una forma sencilla con la información adecuada. Te damos todos los datos que necesitas sobre las visitas que más nos han gustado, medios de transporte para moverte y consejos prácticos. Viajar sola con Etheria Magazine es cada vez más fácil.
Bucólica imagen de Henninsvaer. © Marina Paul Noruega es uno de esos países que enamora a primera vista, y un destino perfecto para cualquier tipo de viajero, lo visites cuando lo visites, y recorras la zona que recorras. Desde el sur, con sus principales ciudades y fiordos, hasta el norte, con algunas de las regiones menos pobladas del continente europeo y con una naturaleza tan salvaje como espectacular.
En este primer artículo sobre Noruega, en Etheria te presentamos un recorrido por uno de los paisajes más espectaculares del país: las islas Lofoten , en el Círculo Polar Ártico, catalogadas como unas de las más bonitas del mundo.
Estas islas invitan a todo tipo de viajeros a disfrutar de su gran oferta de actividades culturales y al aire libre; como deleitarse con el espectáculo de las auroras boreales en invierno o del Sol de medianoche en verano, que brilla sobre los fiordos del país escandinavo las 24h al día entre los meses de mayo a julio.
Islas Lofoten, siguiendo la ruta del Rey Olav Las islas Lofoten, clasificadas como unas de más bonitas del mundo, invitan al viajero a disfrutar de un gran abanico de ofertas culturales y actividades al aire libre. Además, son un lugar perfecto para disfrutar a lo largo de todo el año. En invierno porque es posible disfrutar del reflejo de las bailarinas auroras boreales sobre las gélidas aguas del Atlántico; y en verano, porque el Sol de medianoche (de mayo a julio) crea un singular contraste entre el verde de las montañas y la arena blanca de las playas iluminadas las 24 horas del día.
La mejor forma de descubrir las islas Lofoten noruegas es recorriendo la famosa carretera panorámica de “Ruta del Rey ” por la E10 de este a oeste , desde su capital, Svolvaer, centro de ocio y político de las islas, hasta Å, su población más occidental.
El Bacalao bar, uno de los lugares imprescindibles en Svolvaer. © M.P. De Svolvær a Henningsvaer Svolvær está considerada la capital de las islas y, aparte del puerto de Stamsund, es la única donde hacen parada los barcos de cruceros Hurtigruten en su ruta por las islas. A pesar de que la ciudad carece de un encanto destacado, muchos turistas la visitan para abastecerse antes de empezar el circuito por la E10 y como punto de partida.
Lo que sí vale la pena es visitar su animado paseo marítimo lleno de bares de copas, como Bacalao bar , frecuentado tanto por locales, que hallan ahí su punto de encuentro, como por turistas. Svolvær también cuenta con el único bar de hielo de las islas, el Magic Ice Bar , y algunas de las mejores rutas de senderismo, como la de Fløya o Tjelbergtinden.
Henninsvaer, es la población más turística de Lofoten. ©M.P. Otra de las paradas obligatorias es la localidad de Kabelvåg , a tan solo 6 km de la capital. Pese a su pequeño tamaño, Kabelvåg alberga orgullosa el que dicen ser el mayor edificio de madera del norte de Noruega, la Lofoten Cathedral . Además, cada domingo por la mañana se celebra el mercado de artesanías y productos tradicionales en su plaza central con paradas que reproducen los campamentos vikingos de antaño.
La última parada del día es en Henningsvær , que se ha convertido, junto con Reine, en el más turístico de los pueblos de las islas. El campo de fútbol que lo llevó a la fama está enclavado en una de sus diminutas islas unidas por puentes que forman, en su conjunto, la localidad de no más de 500 personas. Sus “kanelbolle” (rollos de canela) considerados los mejores del país, y el nada fácil ascenso a Festvågtind lo han convertido en una parada obligatoria al recorrer las Lofoten.
Idílicas playas de Ramberg (Islas Lofoten). ©M.P. Playas y senderismo bajo el Sol de medianoche A sorpresa de muchos, las islas Lofoten esconden mil y una playas de arena blanca y aguas turquesas y cristalinas. Entre las más bonitas están la de Ramberg , la de Haukland , la de Kalvika y la de Uttakleiv , también considerada como una de las playas más románticas de Europa por el diario inglés The Times .
Panorámica desde Reinen. ©M.P. A pesar de que todas estas playas cuentan con un sendero lateral con el que poder alcanzar lo más alto de sus respectivas montañas adyacentes, existe una montaña a la que ningún turista puede resistirse ascender por sus vistas. Es la que se encuentra en la, tan famosa como pintoresca, población de Reine , enclavada en el fiordo de su mismo nombre, el Reinefjorden y al amparo de la montaña de Reinebringen. Tras superar los 1.400 peldaños, recientemente renovados, para facilitar la llegada a la cima de los turistas –en un sendero abarrotado durante los meses de verano– podrás disfrutar de una de las panorámicas más espectaculares de las islas Lofoten .
Sin embargo, el día no finaliza en Reine, sino que, a sorpresa de todo viajero, la última parada de la E10 es en Å (pronunciada: O), simbólica por ser la población más occidental de todo el país.
Imposible no enamorarse de Reinen. ©M.P. De vuelta a Svolvær Mientras recorremos la E10 de vuelta a Svolvær, los más “culturetas” pueden disfrutar de una gran variedad de museos. Entre ellos, la fábrica de vidrio de Glasshytta Vikten As, en Vikten , donde se trabaja este material hasta crear formas imposibles; el pueblo museo de Nusfjord , también de parada obligatoria y donde se ha conservado la antigua villa de pescadores en su estructura original; y Borg , donde se encuentra el espectacular Museo Vikingo .
También para los más aventureros existen mil y una actividades a realizar; desde navegar en kayak en Henningsvær, submarinismo en Ballstad o escalada en la mítica Svolvaergeita.
Pueblo museo de Nusfjord (islas Lofoten). ©M.P. Las islas Lofoten presumen de ser uno de los mejores lugares desde donde disfrutar de auroras boreales entre octubre y febrero, gracias a la escasa contaminación lumínica y a la geografía del lugar. Y por si eso fuera poco, entre mayo y julio, el sol de medianoche ilumina 24 horas las islas.
Guía práctica de las Islas Lofoten ¿Cómo moverse por las islas Lofoten? Sin duda alguna, la mejor forma de recorrer las islas es hacerlo por cuenta propia, alquilando un coche o una camper. Si, por el contrario, prefieres no conducir por terreno desconocido, también existe una red de transporte público que recorre las islas de Este a Oeste varias veces al día. Eso sí, mejor planificar los horarios con tiempo para evitar quedarse sin transporte.
Alquiler de “campervans” Para los más aventureros, una magnífica manera de recorrer el país es alquilando una campervan, la cual te permitirá viajar a tu ritmo, haciendo las paradas que desees y quedarte el tiempo que necesites en cada lugar. Recuerda que la acampada en Noruega es libre . De manera que se puede estacionar en cualquier área de servicio o aparcamiento público, y se puede colocar la tienda de campaña allí donde no aparezca la señal de prohibido.
Compañías como Vans of Norway, Lofoten Van Life y Artic Campers ofrecen la posibilidad de alquilarlas totalmente equipadas en las Islas Lofoten.
*También existe la posibilidad de hacerse uno de los populares coches eléctricos . Que, además de ayudar al medioambiente, te permitirá ahorrar en gasolina/diésel (que en Noruega es carísima).
En camper, otro modo de recorrer Noruega. ©M.P. Cómo llegar a Lofoten desde España Si deseas viajar a las islas Lofoten desde España, ten en cuenta que deberás hacer mínimo una escala en alguna de las ciudades principales del país como Oslo, Bergen o Trondheim, para la luego poder continuar el viaje por tierra, mar o aire.
Sin duda alguna, un viaje por uno de los rincones más espectaculares del país donde el viajero puede sentirse inmerso entre tanta naturaleza, las montañas parecen elevarse en forma de acantilado a pocos metros del mar y sus pueblos emergen entre kilómetros y kilómetros de belleza salvaje.
¿Cómo acceder a las islas Lofoten? Existen varias formas de llegar a las islas Lofoten, aunque todas requieren conexión nacional, puesto que todavía no existen compañías que operen a nivel internacional.
Por mar . El famoso ferry-crucero Hurtigruten (hurtigruten.no) que recorre la costa oeste del país de norte a sur a lo largo de todo el año, también hace parada en las islas Lofoten. El billete puede adquirirse usando la opción “puerto a puerto” (solo disponible en la web, en noruego) escogiendo el destino inicial y final, como si de un ferry se tratara.
Existe la posibilidad de reservar en cabina o solamente la entrada al barco sin alojamiento. Las paradas del Hurtigruten en las islas son en las poblaciones de Stamsund y Svolvær.
Museo Vikingo de Borg. ©M.P. Por tierra . Aunque las islas no cuentan con red ferroviaria, existe la posibilidad de llegar en tren a Narvik desde Suecia, vía Kiruna. Una vez en Narvik, que también cuenta con un aeropuerto con vuelos directos a Oslo, entre otras ciudades del país, es necesario continuar vía terrestre, ya sea, mediante el alquiler de un coche o a través de las diferentes líneas de autobús público que recorren las islas.
Por aire . Existen dos aeropuertos en las Islas Lofoten: el aeropuerto de Svolvær y el de Leknes. En ambas, la única compañía aérea que opera es Wideroe , y casi la totalidad de vuelos se realizan vía Bodø, por lo que es obligatorio viajar primero a Noruega.
Desde Bodø también salen ferries hasta Moskenes, al extremo occidental de las islas, donde poder embarcar tu vehículo. Encuentra las diferentes rutas y horarios aquí.
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