El Cairo es una ciudad enorme, desbordada en barrios sin fin y surcada por avenidas con un tráfico caótico ambientado con el sonido incesante de los cláxones. Como viajero, lo habitual es centrarse en sus muy interesantes hitos turísticos y, entre medias, permanecer atento a cómo transcurre la vida cotidiana a través de la ventanilla. En este artículo te contamos cómo organizar un viaje a El Cairo si sólo dispones de dos días para que no te pierdas nada de lo fundamental.
Pirámide de Khafa (Kefren). © Susana García El Cairo es desorden, polvo, gente por todas partes, motocicletas que rebasan y cruzan tu coche entrelazándose en una coreografía imposible… Pero también es cultura, arte y la arquitectura más antigua y sobrecogedora, que te asalta con la forma de perfectas pirámides.
Cuando viajas a esta ciudad, la sombra de que visitas sólo las zonas turísticas a las que permiten el acceso a los viajeros, y que hay una inmensa parte de la ciudad que te es ajena, sobrevuela tu estancia, sobre todo si dispones de pocos días. Esto también pasa en el resto de Egipto, pero en la capital, donde la vida cotidiana de los egipcios discurre de espaldas a sus grandes tesoros arqueológicos y culturales, esta percepción aumenta. Sobre todo en los traslados que te hacen mirar la ciudad desde la ventanilla como si fuera un escaparate. Porque, incluso aunque te muevas con cierta libertad en torno a la Corniche (la zona que rodea al Nilo en torno a los principales hoteles), esta ciudad con sus veinte millones de habitantes (la más poblada de África) es, en general, un auténtico enigma para el occidental.
Calle del Barrio Copto de El Cairo. © Susana García Una ciudad blindada Como viajero, esta enorme ciudad que habita hasta sus cementerios aparecerá en torno a sus hitos turísticos, que son muchos y suficientes para dar contenido a unos días que se llenarán de cultura, historia y arte. Todos ellos maravillosos, pero ajenos al día a día de la ciudad, ya que aparecen extremadamente protegidos y reservados a los visitantes. La férrea seguridad egipcia es lo que tiene, a cambio de garantizar la integridad de los extranjeros ha encerrado entre controles policiales sus grandes tesoros. En cualquier caso, esta circunstancia no resta un ápice de interés cultural a una estancia en El Cairo, sólo se resiente en cierta medida la toma del pulso real de la ciudad.
Qué ver en dos días en El Cairo El Cairo es parte imprescindible de un viaje por Egipto. Dos días completos (tres noches) es lo mínimo que se debería estar en esta enorme ciudad. En ellos verás sus tesoros fundamentales, teniendo en cuenta que siempre se puede alargar la estancia para hacer alguna excursión desde la capital o ampliar las visitas propuestas.
Las pirámides de Giza El yacimiento arqueológico de las pirámides de Giza, situado al igual que el de Saqqara al suroeste de El Cairo, es probablemente el momento más esperado de un viaje a Egipto. Su increíble porte y el misterio que rodea su construcción hacen de ellas uno de esos lugares que hay que visitar al menos una vez en la vida.
Las tres grandes pirámides son las tumbas de tres faraones de la Dinastía IV: Khufu, Khafra y Menkaura, más conocidos con sus nombres griegos Keops, Kefrén y Micerino.
La actividad más popular en este lugar, y que sólo puedes perderte si tienes claustrofobia o poca movilidad, es entrar al corazón de la pirámide de Khufu . Aquí se puede llegar hasta el pequeño espacio de la Cámara del Rey que alberga su bañera-sarcófago de granito. La experiencia es la ascensión en sí misma a través de estrechos túneles y escaleras, ya que no hay ni relieves ni ningún elemento artístico significativo. Únicamente la sensación de estar en el centro de este monumento funerario único que maneja números de infarto: 146 metros de altura, 2.300.000 bloques de piedra organizados en 213 hiladas, superficie de 53.000 metros cuadrados…
El yacimiento tiene mucho más y probablemente pases un buen rato buscando el mejor ángulo para las fotos. Quizá sobre los lomos de alguno de los camellos que se encuentran en los alrededores de las pirámides. Fíjate en lo alto de la pirámide de Khafra , que es la única que conserva parte del revestimiento original; y en la de Menkaura , la más pequeña pero la más compleja a nivel interno.
Las pirámides desde 9 Pyramids Lounge. © SG ✅ Imprescindible : no dejes de tomar algo en 9 Pyramids Lounge . Es un bar-restaurante situado a las afueras del complejo arqueológico con unas vistas increíbles sobre las pirámides. Puedes comer o relajarte en su terraza sobre uno de sus almohadones y, simplemente, dejar pasar el tiempo con una de las mejores vistas que tendrás jamás.
La Gran Esfinge Una visita que no puede faltar en el entorno de Giza es a la Gran Esfinge. La guardiana de la necrópolis fue construida sobre un montículo de piedra caliza para representar al dios Ra Heractes, una divinidad relacionada con Horus, el dios protector de los faraones. Con cabeza humana con los atributos típicos de los reyes egipcios (tocado y barba postiza) y cuerpo de león es otro de los monumentos de El Cairo que se lleva todo los flashes y miradas. A lo lejos verás la famosa Estela del Sueño que guarda la Esfinge entre sus patas: fue añadida mucho después de su construcción por el rey Tutmosis IV (Dinastía XVIII) para agradecer su coronación.
Fotos a la Gran Esfinge. © Susana García Saqqara y las tumbas de los nobles Las pirámides de Giza se han llevado la fama mundial, pero las tumbas de Saqqara guardan todo el encanto de ser lugares menos visitados y esconden auténticos tesoros. El principal foco de atracción es la pirámide escalonada del faraón Zoser . La construcción de piedra tallada más antigua de la historia de la humanidad y la pirámide que sirvió de base e inspiración a las grandes pirámides de Giza. Su orientación responde al culto estelar , que precedió al posterior culto solar egipcio; así el recinto está orientado de sur (origen de la crecida del Nilo) y norte (donde brillan las estrellas circumpolares).
Pirámide escalonada de Zoser. © SG Pero, en este enorme yacimiento arqueológico a las afueras de El Cairo, hay que dedicar tiempo a descubrir alguna de las tumbas de los nobles y sacerdotes que allí fueron enterrados, incluso después de la construcción de las grandes pirámides de Giza. Guardan en forma de mastaba, sin la suntuosidad de los monumentos funerarios reales, mucha más información de los habitantes del Antiguo Egipto. En sus delicados relieves se pueden ver, talladas en piedra para la eternidad, escenas de la vida cotidiana, de cómo cazaban o pescaban, qué comían; cómo eran sus vestidos o qué animales habitaban a las orillas del Nilo. Además, conservan parte del color que recubría los relieves y permiten hacerse mejor una idea de la policromía que imperaba en un mundo que nos ha llegado monocolor por el paso del tiempo.
Escena de pesca en los relieves en la tuma de Kagmeni. © SG ✅ Algunas de las imprescindibles son la tumba de Kagemni , visir del rey Teti, que alberga una deliciosa colección de relieves; la de Nikauisesi , del mismo periodo, que conserva en buen estado parte de la policromía; o la del visir de la Dinastía V Phahhotep II , que también conserva parte del colorido original de los relieves.
El Museo Egipcio No se sabe hasta cuando se podrá seguir disfrutando de este caótico y delicioso museo situado en la céntrica plaza de Tahrir que parece haber cambiado muy poco desde que abrió sus puertas a principios del siglo XX. La inauguración del nuevo Gran Museo Egipcio de antigüedades en la zona de Giza, al que ya se han ido trasladando alguna de las piezas, se pospone continuamente (aunque ya se están ofreciendo visitas puntuales). Mientras, se sigue paseando como si tal cosa entre esta desordenada colección de piezas del Antiguo Egipto, la más grande del mundo a pesar del expolio continuo que sufrió el país por parte de diferentes potencias europeas.
Sala central del Museo Egipcio de El Cairo. © Susana García Es un museo que merece la explicación de un guía especializado para exprimir al máximo la visita, ya que se corre el riesgo de vagar durante horas sin rumbo entre estatuas de faraones y dioses como abducida y sintiéndote muy pequeña ante los miles de años de Historia que te rodean.
✅ Presta atención para que no se te escapen alguna de sus piezas más importantes: la paleta de Narmer, las estatuas de Rahotep y su esposa Nofret, la estatua del faraón Khafra (Kefren) o la triada de Menkaura (Micerino). Las principales piezas del tesoro de Tukankamón ya se han ido trasladando al nuevo museo.
Triada de Menkaura y estatuas de Rahotep y su esposa Nofret. © SG La Ciudadela de Saladino Dejamos atrás el Antiguo Egipto para sumergirnos en El Cairo musulmán a través de la Ciudadela de Saladino. Esta fortaleza medieval de finales del siglo XII que inició este sultán de Egipto y Siria se mantuvo, con diferentes modificaciones y añadidos, como sede de los gobernantes egipcios hasta el siglo XIX. Alberga varios edificios y es uno de esos lugares que han quedado para el conocimiento de la historia, pero al margen del pulso de la ciudad.
Ciudadela de Saladino. © SG En cualquier caso, la mezquita de Muhammad Ali , conocida como la Mezquita de Alabastro, situada dentro de la Ciudadela, es uno de esos edificios cuyo interior consigue dejarte sin palabras. La luz tenue de las lámparas ilumina un interior inmenso coronado por una enorme cúpula que cubre el que en su día fue el mayor espacio dedicado al culto musulmán. Guarda, además, una anécdota histórica de esas que retratan bastante bien cómo era la relación de las grandes potencias europeas con los territorios que dominaban. El reloj situado en el patio fue un regalo que en 1840 hizo el rey Luis Felipe de Francia a Mehmet Ali, a cambio nada más y nada menos que de uno de los obeliscos del templo de Luxor y que hoy luce en la plaza de la Concordia de París. Este reloj no ha funcionado jamás.
Mezquita de Muhammad Ali. © Susana García El barrio copto El barrio de los cristianos egipcios, la mayor comunidad cristiana de Oriente Medio, es una de las zonas más antiguas de la ciudad. Guarda mucho más que unas preciosas iglesias llenas de detalles y un ambiente detenido en el tiempo: son los custodios del idioma copto en su liturgia. Esta lengua, con origen en la del Antiguo Egipto, surgió en el siglo III y se escribe en alfabeto griego. Así que, si tienes la suerte de visitar una de las iglesias mientras se celebra una misa o ceremonia, dedica un rato a captar también a través del oído parte de la historia milenaria de este país.
Interior de la iglesia de San Sergio y San Baco. © Susana García En el paseo por este singular barrio no puede faltar una visita a la iglesia de San Sergio y San Baco , la más antigua, donde se dice que estaba la cueva de la Sagrada Familia en su huida de Herodes y que hoy es una cripta que se puede visitar. Tampoco debes obviar la iglesia de Santa María (también llamada Iglesia Colgante), construida en el siglo IX sobre una de las puertas del fuerte romano de Babilonia; el Museo Copto ; la sinagoga; la iglesia de San Jorge o la iglesia de Santa Bárbara.
El Gran Bazar de Khan el Khalili No hay ciudad árabe si bazar, y en El Cairo hay muchos. El Gran Bazar de Khan Khalili es el que han “cedido” a los turistas, ya que aquí sólo encontrarás a viajeros de todas las partes del mundo en busca de algún tesoro escondido en forma de souvenir . Hay mucha producción en serie y puestos repetidos, pero también se pueden encontrar piezas de decoración interesante y joyas de oro y plata.
Tienda en el Gran Bazar de Khan Khalili. © SG Es un lugar entretenido, donde rápidamente tratarán de captar tu atención con todo tipo de señuelos y frases en español para iniciar un regateo que desencadene en venta. Sólo hay que tener la paciencia suficiente para no desfallecer ante los insistentes comerciantes egipcios. Si prefieres pasar un rato más tranquilo, una buena idea es sentarse a tomar un té o a fumar una shisha en uno de sus cafés, sobre todo en el mítico Café de los Espejos (también llamado El Fishawy).
Guía práctica de una visita a El Cairo ¿Cómo se puede organizar la visita de El Cairo en dos días? Como en Egipto amanece pronto y en la ciudad hace calor gran parte del año, lo mejor es comenzar las visitas muy temprano. Para concentrar en dos días las visitas en El Cairo se puede dedicar el primer día al Antiguo Egipto , visitando por la mañana los yacimientos de Saqqara y Giza y por la tarde el Museo Egipcio. El segundo día se puede pasar visitando El Cairo musulmán en la Ciudadela de Saladino y el bazar de Khan el-Khalili; y el Cairo cristiano en el barrio copto. Si se dispone de más tiempo, una opción es visitar otras mezquitas como la de Al-Rifai , la de Ibn Tulun (considerada la más antigua de la ciudad) o la del sultán Hassan .
¿Es necesario llevar seguro de viajes a Egipto? ✅ Es imprescindible disponer de un seguro si viajas a EGIPTO . Si has reservado el viaje en una agencia, comprueba que llevas incluido uno combinado. Y si no está incluido o viajas por tu cuenta, tendrás que contratar un seguro con una agencia especializada y fiable como INTERMUNDIAL, que te hará un 15% de DESCUENTO , si usas el enlace anterior, por ser lector/a de ETHERIA MAGAZINE. Puedes elegir entre un seguro para este viaje en concreto o uno ANUAL , que te saldrá a cuenta si realizas más de un viaje al año.
¿Cómo vestir en las visitas a El Cairo? De mayo a octubre es probable que en tu visita a El Cairo haga bastante calor, sobre todo mientras recorres los yacimientos arqueológicos, ya que están en el desierto. Tendrás que llevar ropa fresca y traspirable de algodón, sombrero, gafas de sol y crema solar. De noviembre a abril no olvides alguna prenda ligera de abrigo.
Para las visitas tanto de la parte musulmana como del barrio copto hay que llevar los hombros y las rodillas cubiertas (tanto hombres como mujeres). Una buena solución es llevar un par de pareos o fulares en la mochila para cubrirte cuando sea necesario.
Este artículo te ayudará: Qué llevar en la maleta en un viaje a Egipto .
Gran Bazar Khan el-Khalili. © SG ¿Es peligroso visitar El Cairo? El Cairo es una ciudad prácticamente blindada para los turistas. Hay controles de seguridad en todos los sitios arqueológicos y monumentos y en ellos apenas te mezclas con la población local. Incluso el bazar Khan el-Khalili está delimitado y, si tratas de continuar por las tiendas adyacentes la policía te indica amablemente que vuelvas a las calles comerciales para turistas. Para moverse por la ciudad, lo mejor es ir en excursiones organizadas que incluyan los traslados o en taxi.
¿Qué excursiones se pueden realizar desde El Cairo? En dos días en El Cairo podrás ver todo lo que hemos explicado en este artículo, pero si dispones de más días no dudes en hacer en alguna excursión por los alrededores. Puedes ir y volver en el día a Alejandría (a dos horas y media); al Mar Rojo (a menos de dos horas); o al oasis de Fayoum (a hora y media). Echa un vistazo a estas excursiones de Civitatis:
Excursión a Alejandría .Una excursión al Mar Rojo .Excursión al oasis de Fayoum .
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