La isla de Mallorca tiene tantas posibilidades de ocio en verano que podrías pasar unas vacaciones en familia sin dejar un solo instante al aburrimiento. Aquí te proponemos 8 excursiones para realizar con niños en Mallorca, seguro que cuando vayáis a la isla se os ocurren muchas más.
Puerto de Sóller. Las Islas Baleares son un destino estrella para el verano pero, además, permiten todas las escapadas que tú quieras a lo largo del año. Si viajas en familia, Mallorca es un destino inmejorable ya que podéis combinar playas estupendas con la naturaleza de la sierra de Tramontana y una ciudad tan bonita como Palma . Con estas 8 excursiones, perfectas para un viaje con niños en la isla de Mallorca, podréis combinar mar, naturaleza, cultura y turismo activo.
1. Ir en tren histórico y tranvía hasta el Puerto de Sóller El tren de Sóller por la sierra de Tramontana. © Tren de Sóller Es una de las excursiones más bonitas que se pueden hacer en la isla. En la estación de Palma hay que coger el Ferrocarril de Sóller , un tren con mucha historia que conserva un cuidado aspecto antiguo. Lleva durante una hora de trayecto por un paisaje precioso hasta llegar a Sóller, atravesando trece túneles, varios puentes y un viaducto. Después de dar un paseo por Sóller podéis coger el tranvía hasta Puerto de Sóller , que fue el primer tranvía eléctrico de la isla. Si hacéis este recorrido pronto, podréis combinarlo con la excursión en barco a la preciosa cala de Sa Calobra , que es una magnífica travesía desde Puerto Sóller, y contemplar así el precioso paisaje de Torrent de Pareis.
2. Visitar las cuevas del Drach Cuevas del Drach. Las cuevas del Drach son una visita casi imprescindible si viajáis por primera vez a la isla de Mallorca. Es una de las atracciones turísticas más antiguas de la isla, ya que se pueden visitar desde 1935 para contemplar sus curiosas formaciones rocosas. En la visita, de una hora, se combina una parte a pie con otra en barca y un concierto de música clásica de unos diez minutos. Ten en cuenta que aunque vayas en pleno verano la temperatura suele ser de unos 20ºC, ¡no olvides llevar para los niños una chaqueta ligera!
Los grupos son reducidos, lo mejor es comprar las entradas con antelación en la página web. Después podréis tomar algo en las instalaciones de las cuevas, hacer un pícnic en los alrededores (hay zonas habilitadas para ello) o acercaros a Porto Cristo, justo al lado, y disfrutar de su animado ambiente.
3. Hacer una excursión a Formentor Vistas desde el puerto de montaña de Formentor. En el extremo noroeste de la isla se encuentra en cabo de Formentor. La subida por una carretera de curvas deja al llegar a la cima unas vistas preciosas. No podréis evitar parar a hacer fotografías del imponente paisaje de acantilados y mar. Al descender al otro lado, veréis las bonitas playas de esta península de Formentor , de esas que guarda la costa norte mallorquina con agua tranquila y transparente y pinos hasta casi el borde de la orilla. Un lugar perfecto para una jornada playera donde alquilar una barca a pedales o unas tablas de paddle surf. Aquí se encuentra el histórico hotel Formentor , que actualmente está siendo renovado por la cadena Four Seasons.
De regreso, por la misma carretera (no hay otra), merece la pena una parada en el puerto de Pollença para recorrer su Paseo Marítimo.
4. Dar un paseo por Palma Catedral de Palma. © Yves Alarie Dedicar un día a caminar Palma, la capital de la isla, es imprescindible. Lo mejor si se viaja con niños es combinar su casco histórico , con la Plaza Mayor, la Plaza de Cort, el Born y el barrio de la Llotja, con el paisaje abierto del Parc de la Mar que rodea su imponente Catedral , que tiene unas vistas privilegiadas al océano. Tras contemplar el cercano Palacio de la Almudaina , una muy buena opción es realizar una ruta por el Paseo Marítimo (perfecto para patinar) que lleve hasta el famoso Puerto Deportivo de Palma.
Después de comer, podéis acercaros al castillo de Bellver y disfrutar de este imponente edificio del siglo XIV y de los jardines que lo rodean. Y para la merienda, nada como una ensaimada con chocolate en una pastelería tradicional como Can Joan de S’Aigo .
Si consigues despistar un rato a la familia, te recomendamos que leas nuestro reportaje sobre compras, mercados y algo más en Palma de Mallorca para pasar un rato de tiendas por la ciudad.
5. Navegar hasta la isla Dragonera Isla Dragonera. La bonita costa mallorquina hace que en verano apetezcan especialmente los paseos en barco. Una que tiene que estar en vuestra lista de excursiones con niños en Mallorca es la que lleva hasta la isla Dragonera, en la costa occidental, que forma parte del Parque Natural Sa Dragonera . Si queréis dedicar unas horas a hacer una de las rutas de senderismo propuestas en el centro de visitantes, de distinta duración y dificultad, lo mejor es coger el el barco de Cruceros Margarita que tarda tan solo veinte minutos y sale de Sant Elm. Si preferís contratar una excursión organizada (como la que organiza Civitatis ), tendréis una hora para hacer esnórquel en sus transparentes aguas pero dispondréis de menos tiempo en la isla para hacer senderismo. ¡Vosotros elegís!
6. Recibir una clase de golf Golf en el campo Son Muntaner de © Arabella Golf Mallorca. Si sois una familia aficionada al golf, encontraréis en la isla infinidad de campos donde practicarlo. Y si nunca os habéis aventurado en este mundo, puede ser el momento perfecto para dar una clase en familia en uno de los mejores lugares del mundo para practicar este deporte. De hecho, a tan sólo unos pocos minutos de Palma, se encuentran hasta cinco campos preciosos campos, a los que se suman los que se encuentran en el resto de la isla. Puedes consultar en Arabella Golf Mallorca , disponen de varios campos perfectos para dar un clase.
7. Visitar las salinas d’Es Trenc Salineras en las © Salinas d’Estrenc. Realizar una visita guiada por las salinas d’Es Trenc es una de las excursiones con niños en Mallorca que gustará a toda la familia. Podréis conocer el modo de obtención de la sal en una salina que sigue utilizando técnicas tradicionales. Además, os explicarán las numerosas aves que hacen de este paraje natural su hogar y, por qué no, podréis llevaros a casa una sal auténtica, fruto de la evaporación del agua de mar. La visita dura cuarenta y cinco minutos y en su web podéis consultar horarios y teléfonos para reservar.
Además, a pocos minutos se encuentra una de las playas más vírgenes, y en un entorno natural protegido, de Mallorca: la Playa d’es Trenc . Si quieres pasar una jornada playera tendrás que llevar tu propia nevera, sombrilla, etc. porque allí no encontrarás chiringuitos ni alquiler de hamacas. Una experiencia auténtica.
8. Practicar deportes acuáticos en Cala Mayor Cala Nova es perfecta para el Paddle Surf. © Miriam Pastor/Turismo de Palma Cala Mayor es una de las mejores playas de Palma para pasar un día en familia. Además es estupenda para practicar deportes acuáticos. Civitatis ofrece varias opciones que evitarán que estéis todo el día tumbado en la arena: un tour en paddel surf , una ruta en kayak , perfecta para disfrutar de los paisajes de la costa, o alquilar una moto de agua (los menores de 16 años tendrán que ir con un adulto).
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