Sentirse como Indiana Jones en busca del Santo Grial, adentrarse en la Pulchra Leonina , contemplar la obra más sorprendente de Gaudí o tomarse un vino leonés con un peregrino. Te damos diez motivos por los que León es una ciudad única (y tan adictiva como sus tapas). Catedral de León. © Kelu Robles 1. La belleza hipnotizante de la catedral de León Dice su himno que la Catedral semeja, sobria y gentil refleja, el alma de León. Y no le falta razón, uno de los secretos de belleza de esta joya del Gótico reside precisamente en la serenidad de sus esbeltas líneas, de ahí que la llamen Pulchra Leonina. Cuando los rayos del sol atraviesan sus vidrieras —consideradas las mejores de Europa—, sus intensos colores se proyectan sobre dinteles, columnas y tabiques, generando un efecto óptico casi mágico. La magia está muy presente en León.
Interior del Panteón de los Reyes en la Real Colegiata de San Isidoro. © Ayto. de León 2. El misterio del Santo Grial Según algunos estudios, la copa que usó Jesucristo en la Última Cena llegó, de mano en mano, hasta Doña Urraca. Los leoneses presumen de conservar el santo cáliz en el museo de la Real Colegiata de San Isidoro , en la apodada ‘Capilla Sixtina del Románico’ , un monumento reconocido internacionalmente por la excelente conservación de sus claustros, códices y frescos de más de mil años de antigüedad.
Torreones, San Jorge y el dragón de © Casa Botines. 3. Una versión poco común de Gaudí El arquitecto Antonio Gaudí eligió León para construir Casa Botines , una de sus tres obras fuera de Cataluña. Gaudí no parece Gaudí en este palacio en el que se aleja de su etapa más modernista. Sus esbeltos y grisáceos torreones custodian la escultura de un imponente San Jorge que está venciendo a un dragón. La figura atesora muchísimas leyendas, como te contamos en 16 secretos que desconoces de la milenaria ciudad de León .
El interior de Botines alberga el museo más importante del mundo dedicado a Gaudí, y su sótano está dedicado a El Modernista de Ezequiel , el restaurante de una de las firmas hosteleras más importantes de León.
En el Parque del Cid se puede ascender por libre hasta la parte superior de la muralla romana. © Santiago Robles 4. El origen romano y guerrero de León, una ciudad-campamento Aunque la imagen de un león siempre esté presente en la iconografía leonesa, el verdadero responsable de su nombre no es este animal, sino los romanos que formaron la Legio VI Victrix en el siglo I a.C. y levantaron el campamento romano que fundó la ciudad. Desde el centro de interpretación de la Casona de Puerta Castillo se realizan interesantes rutas guiadas gratuitas por el trazado original del campamento legionario, con visita incluida a sus termas y al anfiteatro romano .
MUSAC, Museo de Arte Contemporáneo de Castilla y León. © Juan José Berhó 5. Impregnarse del arte contemporáneo del MUSAC Inspirada en los colores de las vidrieras de la catedral, la sede del MUSAC , el Museo de Arte Contemporáneo de Castilla y León, asume desde el 2005 su papel como motor para la creación de arte contemporáneo de la Comunidad. La confluencia del legado histórico leonés con la experimentación y los nuevos vientos de este museo, trae como resultado un ambiente que da cabida a la reflexión filosófica, desde lo más profundo del ser humano hasta lo más banal. Una visita a su interior no deja indiferente a nadie y, además, la entrada es gratuita los domingos.
Las rosquillas de San Froilán son el dulce típico del 5 de octubre, festividad que conmemora al patrón de León. © Confitería Sanvy 6. De cortos, Prietos, butanos y limonadas: el idioma del Húmedo y un barrio inventado León es una de las ciudades de España con más bares por habitante, por eso, dominar el idioma de sus tabernas es fundamental, ¡y muy divertido! Toma nota: si preguntas por un Prieto en la barra de un bar leonés, te servirán un delicioso vino D.O. León, compuesto por uvas Prieto Picudo y Albarín. Si en lugar de vinos, te vas de cortos , eso significa que probarás la versión mini de una caña de cerveza.
El butano es la versión abstemia de los cortos, y su nombre hace referencia al refresco de naranja que lo compone. A veces, las cosas no son lo que parecen en León: si te encuentras con un cartel que anuncia “limonada ”, en realidad se trata de la bebida más famosa de la Semana Santa leonesa, un rojizo brebaje alcohólico similar a la sangría, pero elaborado artesanalmente y con un punto meloso.
Los vinos siempre irán acompañados de tapas en León. © Ayto. de León Y todo esto incluirá siempre, siempre, SIEMPRE, una considerable tapa cuyo tamaño aspira a ración. En el Barrio Húmedo , en pleno casco histórico de la ciudad, probarás la cecina y el chorizo de Ezequiel , las sopas de ajo del Camarote Madrid , las croquetas del Rebote , las patatas picantes del Flechazo … La lista es interminable, por eso en León se van “de alterne”, es decir, cambian de bar para poder descubrir nuevos bocados cada día. No te pierdas 48 horas en León.
Los leoneses son tan creativos que se han inventado un barrio y le han puesto nombre: el Barrio Romántico se encuentra muy cerca del Húmedo y representa la escena gastro más coqueta de la capital, con locales de cocina internacional, vermuterías y bonitos pubs de copas, como el antiguo cabaret de El Gran Café .
La Exaltación de la Cruz de la procesión de Los Pasos. © Ruben Ojeda 7. Sentir la magia de su Navidad y el fervor de su Semana Santa El valor de sus tallas y la particular sobriedad con la que se viven sus procesiones han convertido la Semana Santa de León en un evento de Interés Turístico Internacional . Sin embargo, la devoción durante el Encuentro de la procesión de Los Pasos no impide que los leoneses también celebren, cada Jueves Santo, San Genarín . Es la procesión laica más famosa de España en la que se honra la leyenda de Genaro Blanco, un pellejero leonés aficionado al orujo, al tute y a las mujeres que murió arrollado por el primer camión de la basura.
Ya lo avisamos, la magia en León tiene un papel muy especial. Del 25 de diciembre al 1 de enero, la ciudad celebra el XVII Festival Internacional Vive la Magia , este año con especiales medidas de seguridad. Durante esos días, cualquier cosa es posible en las calles de León y la ilusión de los más pequeños se convierte en lo más importante.
Interior del recién renovado Parador de León. © Paradores 8. Dormir como un peregrino de lujo Después de tres años de reformas integrales, el Parador de León ha vuelto a reabrir sus puertas coincidiendo con la llegada del Año Xacobeo 2021 . Se encuentra en San Marcos , un edificio de gran valor artístico cuyo origen se remonta al siglo XII, aunque fue reformado y ampliado en el siglo XVI. Este soberbio modelo del plateresco renacentista ha sido convento, hospital, campo de concentración, hospedería de peregrinos, cuartel y hasta cárcel en la que estuvo preso Francisco de Quevedo . Los huéspedes del Parador disfrutarán de su estancia rodeados por más de quinientas obras de arte, una de las razones por las que ha obtenido la exclusiva categoría cinco estrellas Gran Lujo.
Plaza del Grano. © El Leonés Errante 9. Vivir sus dos estaciones: el invierno y la del tren A menos de dos horas en tren de Madrid, León hoy está más cerca que nunca del resto del mundo. Por eso, más allá de los chascarrillos respecto al frío en invierno, esta gélida cuestión ofrece una excusa ideal para disfrutar de un fin de semana en San Isidro , la estación de esquí más grande de la provincia.
El Museo de León es el más antiguo de la provincia. © El Leonés Errante 10. Irás por su abrumador legado histórico, volverás por su ambiente ‘prestoso’ Lo que más permanece en nuestra memoria al regresar de un viaje son las sensaciones y las anécdotas que hemos vivido. Si hay algo que no olvidarás de León es su ambiente, la paz que transmite la Plaza del Grano , enclavada entre el monasterio de Carbajal con su hospedería Monástica Pax y el soportal más antiguo de la ciudad. O el bullicio de la plaza de San Martín , el de la Plaza Mayor y el ambiente de compras en la avenida Ordoño II . Existen muchas razones para descubrir qué es eso de la prestosidad leonesa , o por qué su canción popular más querida exclama: «Todos somos de León, ¡contentos de ser de aquí! (…) Si me sacan de León yo no sé cantar, yo no sé reír».
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