Esa idea tan extendida de que en Gran Bretaña se come fatal o la ocurrencia de incluir en la maleta productos envasados al vacío para que los familiares que estudian o trabajan allí “coman en condiciones”, ¿tiene razón de ser? Eso lo tendrás que decidir tú misma cuando conozcas estos productos, hábitos y platos británicos.
Desayuno inglés completo. © Nonsap Visuals Cada país o región tiene sus propias peculiaridades gastronómicas, heredadas a lo largo de su historia o forjadas debido a su limitación y ubicación geográfica. Estas variables crean una cocina única que también forma parte de esa cultura que debemos conocer en nuestros viajes. Respetar, probar y muchas veces comprender esos platos o hábitos gastronómicos también nos enriquecen como viajeros. En este artículo, hemos elegido nueve platos británicos o experiencias alrededor de la mesa para acercarte a la gastronomía de estos lugares, y que disfrutes de su cocina en tu viaje a Inglaterra, Gales, Escocia o Irlanda del Norte.
Full English breakfast Empezamos esta selección de platos británicos con el surtido de manjares del desayuno inglés. Sin duda, empiezan con energía y dejan claro que esta es la comida más importante del día. Debes saber antes de pedirlo que un “Full English breakfast” lleva tostadas, huevos (preparados como elijas), bacon, salchichas, judías dulces (baked beans ), champiñones, tomate asado, patatas… Lo puedes acompañar de té o café. Si viajas a Inglaterra algunos lugares recomendables para probarlo son Balthazar en Londres, Jake’s in the city en Plymouth y Trof en Manchester.
Fish and chips, comida rápida al estilo inglés. © Davey Gravy Fish and chips, el fast food inglés Otro de los platos británicos clásicos es el Fish and chips y se puede degustar en todo el territorio nacional. Este pescado tan popular es bacalao rebozado y frito que habitualmente se sirve acompañado de patatas fritas –aliñadas con vinagre y sal–, y todo ello envuelto en papel de periódico.
Aunque lo más tradicional es pedirlo en un bar para llevar o en una furgoneta de street food , también se ha ido incorporando a las cartas de los restaurantes e, incluso un tres estrellas Michelin como el cocinero Hestos Blumenthal se ha animado a hacer su interpretación en The Fat Duck (Bray, Berkshire). ¿No te parece apetecible su «rodaballo rebozado con una mezcla de varias harinas, vodka, miel y cerveza»? Tampoco suena nada mal el pescado rebozado que sirven en Colmans (South Shields): emplean género fresco y una masa con una receta secreta que lleva fidelizando a su clientela desde 1926.
Por último, toma nota de un restaurante que ha recibido un reconocimiento especial por su fish and chips: The Cod’s Scallops , en Wollanton (Nottingham), ganó el National Fish & Chips Awards en 2020.
Asado al estilo británico. ©VisitBritain Sunday Roast Volviendo al ámbito familiar, no podemos dejar de mencionar el Sunday Roast entre los platos británicos por excelencia. Este “asado de domingo” se relaciona con el plato del día de los pubs, ya que era lo que se solía comer en ellos tras la salida de misa los domingos. Este plato está compuesto de Yorkshire pudding , una tartaleta horneada con forma de cuenco que se rellena con carne, patatas y chirivías asadas, coliflor con queso, zanahoria y repollo. Como es habitual, la receta puede tener variantes en función de si se cocina en casa o en restaurantes. En Londres tiene mucha fama el Sunday roast de la cocinera Sally Abé en The Hardwood Arms .
The Crab House Cafe, criadero de ostras y restaurante. ©VisitBritain/ Rod Edwards Ostras ricas (y más baratas) ¿Vinculas a Gran Bretaña con el marisco y el pescado? Probablemente, no mucho… Debes saber que en sus 30.000 kilómetros de costa abundan mejillones, cangrejos, gambas, almejas, bacalao, salmón y, también, ostras. Aunque las ostras francesas se llevan la fama, en Inglaterra (Essex, Kent, Dorset, Devon, Cornwall), Escocia e Irlanda también se crían. Y una cosa muy positiva es que, al haber gran cantidad, sus precios no son prohibitivos.
Si te gustan las ostras, anímate a hacer una ruta por Whitstable (Kent), donde se dedican a criarlas desde hace seis siglos. Allí las venden en puestos junto al puerto y en la playa, además de en restaurantes como The Royal Native Oyster Store s, donde sirven la ostra nativa de Whitstable . Puedes continuar la ruta para degustar también ostras de roca de la isla de Mersea , en el Mersea Island Fish Bar de Essex.
Afternoon tea en el Hotel Palé Hall (Gwynedd, Gales). ©VisitBritain Afternoon tea o la hora del té Y a primera hora de la tarde llega el ritual del té británico, su famoso ‘Afternoon tea ‘. El origen de esta experiencia tan recomendable se remonta a 1840, cuando Anna, la séptima condesa de Bedford, pidió un día algo de comer en torno a las 4 de la tarde. Para satisfacer su antojo solicitó una bandeja con té, pan, mantequilla y tarta. Le debió sentar tan bien que empezó a hacerlo todos los días, e invitaba a sus amigos a unirse a esta buena costumbre. Poco a poco se fue transformando en un evento social en el que todas las damas de la alta sociedad deseaban ser invitadas y se vestían con sus mejores galas. El frugal contenido de la bandeja inicial se fue ampliando y se añadieron sándwiches variados, scones (un tipo de panecillo esponjoso), mermeladas, distintos bollos, etc. Sin duda, merece la pena dejarse tentar por estas delicias, sobre todo si has tomado el almuerzo en torno a las 12.30 o 13 horas.
La hora del té en Londres En Gran Bretaña encontrarás decenas de lugares donde gozar de la experiencia del “Afternoon tea”, pero si te quieres dar un capricho –y estás en Londres– toma nota del que ofrece el Claridge’s . En su precioso vestíbulo Art Déco te servirán, entre otras delicatesen, un surtido de tés elegidos por Henrietta Lovell de Rare Tea Company , sándwiches de pepino orgánico o deliciosos bocaditos de chocolate Valrhona, entre los mejores del mundo.
Un té en el Titanic o en un tren del Orient Express Otro lugar muy original para tomar el té por la tarde se encuentra en el muelle donde se construyó el Titanic, en Belfast. Allí sirven el Afternoon tea en la Suite Titanic, que dispone de una réplica de la escalera recreada en la película de 1997, mientras escuchas de fondo las notas que lanza una banda de jazz.
Plato de fruta del Venice Simplon-Orient-Express. © Matt Hind/ Belmond No menos curioso es tomar el Afternoon tea en el Orient Express , en el interior de un vagón de un tren British Pullman, con estética de los años 20 o 30. La experiencia comienza en la estación de Victoria, de donde parte el tren, y durante tres horas degustarás tu té y bocaditos dulces o salados en vajilla de porcelana mientras recorres la campiña británica.
Y, como siempre hay alguien a quien no le gusta el té, te contamos también que en la bodega de Sussex, Bolney Wine Estate, han creado una variante donde el té se sustituye por un espumoso rosé .
Los pasteles en Gran Bretaña son una dulce tentación. © Sebastian Coman Photography Pecados dulces y mermeladas ¿Qué sería de la hora del té o de una buena merienda sin bocados dulces? En Gran Bretaña vas a alucinar con sus pasteles y tartas, hay muchos más aparte de los conocidos apple crumble o la Victoria sponge cake (aquí tienes la receta ). Eso sí, si estás a dieta no te acerques a los scones y a las mermeladas caseras, porque podrías comerte diez de estos panecillos escoceses sin darte cuenta. Quienes sean más de salado pueden acompañar los scones con queso, chorizo o con lo que quieran.
¿Algunas direcciones recomendables? E5 Bakehouse , por sus dulces elaborados con ingredientes orgánicos y de origen local. Deliciosos sus rollitos de canela, la tradicional tarta Bakewell y la carrot cake (pastel de zanahorias). Si quieres aprender a preparar algunas recetas dulces, en The Artisan Bakehouse, un bonito cottage de Sussex, tienen cursos para que dejen de guardar secretos para ti los scones, los rollos de canela o los dulces de Navidad y San Patricio.
Borough Market de Londres. © Julian Hochgesang Comida callejera para llevar Comprar comida en furgonetas o vendedores ambulantes al mediodía es una práctica ideal cuando viajamos porque nos permite seguir nuestro ritmo y, además, es más económica. Aunque a veces te los encuentres por cualquier sitio, hay zonas y mercados donde merece mucho la pena pasarse por su ambiente y la posibilidad de hacer compras. Si viajas a Londres, los domingos puedes acercarte a Brick Lane para degustar platos de todo el mundo, o a Borough Market, uno de los mercados con más solera de la capital inglesa.
También existen otras zonas del país que practican el street food . El Saint Nicholas Market, el mercado más antiguo de Brístol, se caracteriza por sus pasteles de carne, gyozas, curry y cocinas del mundo. En Manchester está Grub, en una vieja estación de tren, donde es posible gozar de un gran ambiente alternativo con cine, música y comida callejera.
Uno de los deliciosos platos del © pub Fordwich Arms. Gastronomía Michelin en los pubs Te hemos hablado de los pubs en un apartado anterior pero merece un espacio propio, ya que en Gran Bretaña estos lugares se convierten en espacios de conexión social donde corre la cerveza, la música y la buena conversación. Algunos historiadores aseguran que sus precursoras fueron las tabernas romanas que se levantaban junto a las calzadas para saciar la sed de las tropas. Si en un primer momento era el vino lo habitual, la cerveza se ha hecho con el podio desde hace mucho tiempo.
El concepto de pub británico siempre nos suele sorprender, ya que a ellos no se acude sólo a beber sino que sirven ricos platos británicos tradicionales, y algunos incluso han obtenido alguna estrella Michelin. Un pub que merece ser destacado es Fordwich Arms (en Fordwich, Kent), donde el chef Daniel Smith ha logrado el reconocimiento como ‘Mejor Restaurante Inglés de 2019-2020’ por los AA Hospitality Awards. ¿Su secreto? Excelente materia prima y productos locales muy seleccionados. La carne llega de una granja vecina, las manzanas de Kent, las ostras vienen de Whitstable, etc. Si te interesa el mundo gastronómico, toma nota también de The Harwood Arms (Londres) y The Red Lion Freehouse (East Chisenbury, en Wiltshire).
Viñedos en el condado inglés de Sussex del Este. © Visit Britain Los vinos ingleses La cerveza forma parte del ADN de la población, como en la mayor parte de del mundo. Las cifras no engañan cuando aseguran que es un 70% más demandada que el resto de bebidas. Visitar una fábrica de cerveza o sus pubs históricos siempre es buena idea, pero también se puede ir de vinos. Al sur del país, en los condados de West y East Sussex, Kent y Surrey, los viticultores encontraron el clima perfecto para elaborar vinos espumosos con uvas Pinot Noir, Pinot Meunier y Chardonnay. Para conocer mejor sus particularidades se puede visitar Hambledon Vineyard, el primer viñedo comercial del siglo XX, y Simpson’s Wine Estate (donde un tobogán te lleva directamente a la sala de cata) que ganó una medalla de oro en 2019 en el Champagne and Sparkling Wine Wold Championships .
Y después de leer todo lo anterior, ¿aún piensas que los platos británicos son aburridos o que vas a pasar hambre en tus vacaciones?
Bucólica imagen de Los Cotswolds. © Ana de Sousa También te puede interesar…
De road trip por los Cotswolds, un viaje al corazón de Inglaterra .
Guía para recorrer las Highlands o Tierras Altas de Escocia .
Un viaje a Londres en diez películas inolvidables .
6 visitas imprescindibles y 2 lugares casi secretos de Irlanda del Norte .