La menstruación en muchas culturas sigue siendo un tabú y/o se considera impura. Cuando una mujer tiene la regla es discriminada o se la excluye de las actividades cotidianas. Y esto ocurre a pesar de que, como WASH United recuerda, “menstruar es una cuestión de derechos humanos”. El 28 de mayo se celebra el ‘Día Internacional de la Higiene Menstrual’ con el que se reivindica el derecho a gestionar la menstruación de una forma privada y digna. La menstruación sigue siendo un tabú en muchas culturas. © Amevi Wisdom Casi 12 millones de mujeres, jóvenes y niñas (el 25% de la población) menstrúan en España. Es parte de su proceso fisiológico natural. Sin embargo, hay mujeres que no tienen ni agua ni intimidad para lavar las compresas de tela, o no las pueden tender al sol porque es un tabú: “todavía hay mucha presión” respecto a la menstruación, recuerda Rosa Paradela , instructora de yoga para ciclo menstrual y climaterio.
A la falta de agua corriente o jabón para su higiene menstrual se une el estigma al que las mujeres que menstrúan tienen que hacer frente en países donde la regla es aún un tabú. En muchas culturas, la menstruación se considera impura y se discrimina a las mujeres durante esos días o se las excluye de las actividades habituales cuando están con el periodo. Las normas sociales y culturales a menudo marcan la menstruación como un tabú, lo que significa que las niñas no pueden hablar libremente ni buscar apoyo para comprender el proceso por el que están pasando.
Sunita ofrece información a las niñas. © ONG Worldvision De la higiene menstrual al empoderamiento femenino El 28 de mayo se celebra el Día Mundial de la Higiene Menstrual, que tiene por objetivo reivindicar un mundo en el que todas las mujeres y niñas puedan gestionar su menstruación de manera higiénica, con seguridad, privacidad y dignidad , estén donde estén. Este año, la Jornada ‘MH Day’ tiene como lema #ItsTimeForAction para catalizar la acción hacia un mundo en el que las mujeres y las niñas ya no sean estigmatizadas debido a sus ciclos. En 2020, el hashtag fue #JusticiaMenstrual.
“La higiene menstrual es vital para el empoderamiento y el bienestar de mujeres y niñas en todo el mundo”, asegura Eloisa Molina, Coordinadora de Comunicación de la ONG WorldVision en España, que explica que “es algo más que el acceso a toallas sanitarias y baños apropiados, aunque eso también es muy importante. También se trata de garantizar que las mujeres y las niñas vivan en un entorno que valore y respalde su capacidad para manejar su menstruación con dignidad”.
© Plan Internacional ha repartido kits en Malawi. Educación para evitar la discriminación por tener regla La pobreza menstrual se define como la falta de acceso a productos adecuados para la recogida del sangrado menstrual, de jabón y agua limpia, así como la falta de lugares seguros para el aseo, los falsos mitos, el estigma y la falta de información y educación sobre la menstruación. “Necesitan productos gratuitos y descartables, pero también necesitan educación feminista para que la regla no sea un objeto de discriminación”.
Days for Girls es un movimiento global que prepara y distribuye soluciones de salud menstrual sostenibles a las niñas. Desde 2015 ha entregado 800 kits de higiene menstrual a niñas de Uganda y Somalia . En países como estos, la falta de acceso a productos de higiene menstrual es un factor clave para restringir la libertad y las oportunidades de las niñas: la carencia de letrinas y de productos de higiene femenina en las escuelas supone para muchas el fin de su educación.
También Plan International proporciona material educativo sobre salud y derechos sexuales y reproductivos. En Malawi , la ONG ha repartido kits con productos sanitarios e higiénicos a más de 3.800 mujeres de la región sureste del país. Desde la ONG recuerdan que la higiene menstrual no es solamente una cuestión sanitaria, sino que se trata de un paso importante para salvaguardar la dignidad, la integridad corporal y las oportunidades vitales de las niñas, y que ayuda a las adolescentes a mantenerse sanas, protegerse de infecciones y poder completar su educación.
Las niñas pierden hasta una semana de clase al mes. © Yogendra Singh “Es un pequeño acto de liberación, ven que pueden seguir adelante” La mayoría de las niñas de países pobres no tiene acceso a compresas sanitarias o tampones, que tampoco pueden permitirse comprar. Sin estos productos de higiene femenina, muchas faltan al colegio cuando tienen la regla. Eso significa que pierden hasta una semana de clases cada mes, y al quedarse atrás, finalmente abandonan la escuela.
La menstruación es una amenaza oculta para la educación de las niñas en edad escolar: más del 40% no asiste a clase cuando tiene el periodo . Con el objetivo de mejorar la permanencia de las niñas en la escuela, el programa DREAMS de WorldVision ofrece soluciones sostenibles a la higiene menstrual e imparte formaciones para deconstruir actitudes, creencias y puntos de vista sobre la menstruación, acabar con los tabúes y naturalizar el ciclo menstrual.
“Es un pequeño acto de liberación , ven que pueden seguir adelante”, asegura Eloisa Molina, coordinadora de Comunicación de la ONG en España, que explica que se trata de una acción dentro de un proyecto muy grande: “es una forma muy sostenible de que puedan seguir con sus vidas, porque a la mayoría de las niñas dejan de acudir al colegio cuando tienen la regla. La semana que sangran no pueden ir al colegio, así que se tienen que quedar en casa y al final dejan de estudiar”. En muchos países hay un amplio porcentaje de niñas que no empiezan la secundaria por este motivo.
“En Ghana, por ejemplo, te sorprendes de que en secundaria hay dos niñas como mucho y la menstruación marca ese punto en que se supone que la niña pasa a la vida adulta”.
Durante los días de menstruación las niñas no van a clase. © Nikhita S. La menstruación, una amenaza oculta para la educación de las niñas Gracias a un proyecto con Sesame Workshop , la organización sin fines de lucro de «Barrio Sésamo», WorldVision trabaja con niños y niñas bajo la temática de Agua, Saneamiento e Higiene . “Fomentamos la higiene y el lavado de manos a través de esas iniciativas que ayudan a acercarse a los niños, que enfatizan mucho con esos personajes de Barrio Sésamo», explica Eloisa Molina, coordinadora de Comunicación de la ONG en España. “Gracias a ese proyecto trabajamos en la educación menstrual y en quitar barreras, como hacer accesibles los baños a las niñas que menstrúan en países donde ni siquiera tienen las instalaciones adecuadas para cambiarse».
En Uganda , las niñas y los niños reciben educación sobre la higiene menstrual a través del Club de Salud , que lleva a cabo sesiones de sensibilización y obras de teatro para informar y desestigmatizar temas de género que son tabú. El objetivo de los clubes de cambio de comportamiento es reducir el estigma que rodea la menstruación y enseñarles que es una parte natural de la vida. De este modo se genera un entorno en el que las niñas reciben el apoyo de la comunidad, incluidos niños y hombres, y no se tienen que enfrentar a restricciones, vergüenza ni burlas. Los 12 maestros de la escuela de primaria St Peter’s Mataale, en el distrito de Buikwe, han sido capacitados por la ONG en el manejo de la higiene menstrual.
Copa menstrual. © Oana Cristina «Sólo un 36% de las niñas de Bangladesh sabe qué es la regla antes de tenerla» En Bangladesh , más de 300 jóvenes se reúnen cada mes para hablar de la salud sexual y reproductiva de los adolescentes, haciendo especial hincapié en la gestión menstrual. La tasa de abandono escolar de las niñas en secundaria en este país es de entorno al 46% y sólo el 36% de las niñas sabe qué es la menstruación antes de tenerla. En Malawi muchas adolescentes se casan o se quedan embarazadas de hombres mayores a cambio de dinero para «sus cosas».
Con motivo del ‘Día Internacional de la Higiene Menstrual’, que se celebra el 28 de mayo, WASH United, promotora y coordinadora de la iniciativa, recuerda que la menstruación es una cuestión de derechos humanos.
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