Córdoba rezuma alegría y arte por los cuatro costados. Es un testigo presente de la historia de España bañado por las aguas del río Guadalquivir y uno de los destinos a los que escaparse ahora que la primavera empieza a asomar las orejas, perfecto para viajar en pareja y disfrutar de su gastronomía.
Alcázar de Córdoba. La importancia de Córdoba es tangible. A día de hoy, la que fuera la capital de la España musulmana, sigue enamorando a turistas de todas partes del mundo. Y razones no le faltan, desde su patrimonio, sus casas con patios andaluces, el casco antiguo, la judería o la cercana Medina Azahara (conocida como Córdoba la Vieja) o lo que era la ciudad romana. Hay que vivir Córdoba , pasear por sus callejuelas, dejarse contagiar por el espíritu de alegría del sur, comérsela a bocados y disfrutarla como merece. Por ello, en Etheria nos escapamos y te contamos qué hacer y qué ver si has planeado una escapada romántica en la que la gastronomía sea también protagonista. El primer paso podría ser hacer un Freetour por Córdoba para situarte, pero también puedes comprar una guía e ir aprendiendo por tu cuenta.
Historia en cada piedra Ya en tiempos de los romanos Córdoba adquirió gran relevancia. Pero, sin duda alguna, el periodo de esplendor de la capital andaluza se vivió con el Emirato instaurado por Abderramán I y el califato Omeya de Abderramán III. Ambos dejaron un legado que hoy es intrínseco a la ciudad, que respira ese pasado árabe que tiene su mayor expresión en la Mezquita-Catedral , sin duda su monumento más visitado. Lo que originariamente fue una mezquita del siglo X, más tarde, en periodo cristiano, se convirtió en catedral. Si tienes ocasión, sube a la torre, la vista hacia la judería y el centro histórico es espectacular.
*Visita guiada por la mezquita-Catedral de Córdoba, con un guía acreditado. La puedes realizar también si haces un viaje en familia (menores de 10 años, gratis) y llevas carro de bebé. Resérvalo con antelación .
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Interior de la mezquita-catedral de Córdoba. De nuevo con los pies en la tierra, es aquí es donde se sitúa la judería de Córdoba, otro de sus mayores reclamos turísticos de estrechas callejuelas, vida y monumentos como la Sinagoga , la plaza Maimónides o la Casa Museo Andalusí (lacasaandalusi.es), todo un deleite para los sentidos.
La magia de los patios cordobeses Uno de los grandes espectáculos cordobeses tiene lugar en mayo, con la apertura de los patios llenos de flores. Pero, ¿sabías que puedes visitarlos durante todo el año? Gracias a la ruta de los Patios del Alcázar Viejo , tendréis la posibilidad de disfrutar de su belleza genuina cuando queráis y evitando la masificación de mayo. Se recorren 7 recintos de Patios y se reserva a través de Turismo de Córdoba y, desde luego, es una actividad que nadie puede perderse.
Interior de uno de los famosos patios cordobeses. La visita a la ciudad no será completa si no recorres la Calleja de las Flores o si no visitas otros hitos como el Puente Romano , el Alcázar de los Reyes Cristianos o el Palacio de Viana .
A comerse Córdoba ¿No pensáis que, cada vez más, la visita a cualquier lugar va ligada a la experiencia percibida en todos los sentidos? Hemos conocido sus monumentos imprescindibles, hemos recorrido sus calles y rincones con encanto, respirado la cultura de antaño… ¿Qué nos queda por hacer? Saborear los los productos y platos típicos de esta gran ciudad. En un lugar como Córdoba, la gastronomía juega un papel importantísimo. Tanto es así que muchos de los platos que hoy alabamos, tienen su origen allí, en esa ciudad andaluza. Es el caso del salmorejo cordobés, al que hasta dedican la Calleja del Salmorejo Cordobés donde se exhibe una receta original para prepararlo en casa que reza lo siguiente:
«1 kilo de tomates, 200 gramos de pan, 100 gramos de aceite de oliva virgen extra, 1 diente de ajo, 10 gramos de sal. Para después limpiar y triturar los tomates, colar para quitar la piel y las pepitas, volver a triturar añadiéndole pan, el aceite, los ajos y la sal. Decorar con huevo duro picado y trocitos de jamón ibérico.»
¡Voilà! Tenemos en plena calle la receta del salmorejo perfecto. Tendréis que probar también los flamenquines, el rabo de toro, el jamón ibérico de los Pedroches o las berenjenas con miel.
La mejor forma de no perderse nada es realizando un tour gastronónimo por Córdoba , y este de Civitatis no está nada mal porque tiene la Visita y la comida incluidos .
Berenjenas con miel. Casa Pepe de la Judería Una de las instituciones en las que degustar todos estos platos típicos de la cocina cordobesa es la Taberna Casa Pepe de la Judería . Fue comprada por Pepe Giménez Aroca en 1928, aunque ya entonces era una taberna bajo otro nombre. El lugar es de lo más acogedor y se postula como la opción perfecta para pasar un buen rato entre vinos, tapas y amigos, y tiene además una terraza con vistas a la Mezquita, que permite disfrutar de las mágicas noches de la Judería cordobesa .
Recomiendo Para seguir disfrutando con producto local pero con un ‘twist’, la elección será Recomiendo (www.recomiendopower.com), del chef Periko Ortega, que busca ahondar en los recuerdos de la infancia, con mucho trampantojo y diversión en torno a la mesa. Prueba de ello son platos como la ropa tendida, que se presenta como dos láminas de panceta ibérica colgadas de un pequeño tendedero, unas migas marinas o la mazamorra, el plato que precedió al salmorejo que se elaboraba con almendras, pan, aceite de oliva y vinagre, antes de la llegada del tomate a la Península.
Chef Perico Ortega del restaurante Recomiendo. Noor Si sois gastrónomas convencidas y queréis daros un homenaje para recordar, hay una dirección imprescindible en Córdoba. En el barrio de Cañero, abrió en 2016 sus puertas Noor (noorrestaurant.es), el proyecto personal del chef Paco Morales. Más que un restaurante al uso se trata de un espacio cultural, en el que Morales ha invertido muchísimo tiempo. ¿La razón? Conocer y viajar a épocas pasadas a través de la genuina cocina andalusí, trayéndola hasta nuestros días. Arrancaron con el año X y cada temporada van avanzando en el tiempo e indagando en el esplendor gastronómico de Al-Ándalus, tanto a través de la puesta en escena como en la cocina, y hasta en las herramientas que utilizan –platos, cubiertos o manteles– desarrollados por el mismo Paco Morales y su equipo junto con artesanos.
Delicada presentación en el restaurante Noor. Y para dormir… Ya que nos encontramos de lleno en la historia de la ciudad, nos quedaremos en el hotel boutique Madinat , ubicado en el corazón de la antigua Medina de la ciudad, entre callejuelas blancas y empedradas. El hotel se articula en torno a un patio y dispone de 11 habitaciones con nombre propio y cada una diferente, que conservan el suelo hidráulico original del XIX. La suite Hamama, en el antiguo palomar de la casa, es una de esas maravillas de las que no apetece salir nunca, con cama king size , bañera estilo alberca y un espacio para soñar bonito. Pura magia.
Suite Hamama del hotel boutique Madinat. También te puede interesar… Planes imprescindibles con amigas en Córdoba .
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