Los fines de semana de otoño invitan a realizar una escapada con un vuelo directo a alguna ciudad europea. Podrás disfrutar en un par de días de su vida cultural, restaurantes y arquitectura, y alegrar así estos meses en los que los días son cada vez más cortos. Aquí te damos 10 ideas para aprovechar la temporada baja en el turismo.
Dicen que el otoño es la estación más triste del año, pero esto depende de cómo te la tomes. Si no cedes a la melancolía y organizas un fin de semana para visitar una ciudad europea puede convertirse en una estación preciosa. Elige cualquier excusa: una exposición, un restaurante de moda o un espectáculo y prepara ya tu viaje.
1. Milán. Fachada del Duomo de Milán.
Es perfecta para un fin de semana. En Milán todo está cerca y la ciudad se puede recorrer caminando. Su magnífico Duomo ya merece un viaje, pero si le sumas la posibilidad de ver de cerca La Última Cena de Leonardo da Vinci, sus museos (como la Pinacoteca di Brera o el Museo del Novecento), su zona comercial y sus restaurantes, te saldrá una escapada redonda.
2. Lisboa. Los miradores de Lisboa dan otra perspectiva de la ciudad.
Lisboa es una de esas ciudades que cuando la visitas te preguntas ¿por qué no vendré más a menudo? Está cerca, puedes viajar a ella en avión, tren o coche y siempre es apetecible. Y, como proponemos en este artículo, se puede recorrer visitando sus ‘miradouros’.
3. Ámsterdam. Los canales son los que aportan más personalidad a Amsterdam. © Carmen Giró
Aunque tiene fama de lluviosa, lo bueno de Ámsterdam es que tiene infinidad de sitios donde resguardarse: museos (como el Rijksmuseum o el Museo Van Gogh), cafés, cervecerías y hasta los barcos que recorren los canales están techados. No te pierdas el pequeño oasis del Beginhof y el barrio del Jordan, animado y bohemio.
4. Varsovia. Escultura de Chopin. © Manena Munar
Varsovia es una ciudad que sorprende y que se recorre perfectamente en un fin de semana. Además de su reconstruida Ciudad Vieja, merece la pena visitar la animada Nowy Swiat (calle del Nuevo Mundo), el Parque Lazenki, el barrio de Praga y el Castillo de Ujazdowski, convertido en Centro de Arte Contemporáneo. ¿Sabías que es famosa por el jazz? Disfruta de algún concierto en sus animados clubes.
5. Zúrich. Zúrich al atardecer.
Esta ciudad suiza es mucho más animada de lo que te imaginas y ofrece bonitos paseos que llevan hasta su precioso lago. Si viajas a Zúrich en las semanas de Adviento, justo antes de la Navidad, podrás disfrutar de sus preciosos mercadillos navideños como el del barrio de Nierderdorf o el de la Estación Central.
6. Viena. Vistas del edificio de la Ópera desde el Museo Albertina.
¿Por qué no escaparte un fin de semana a la elegante Viena con tu madre o con tus amigas? Se presenta espléndida con los colores del otoño y su contenido cultural, que se manifiesta en sus museos y programación de conciertos y exposiciones, se disfruta estupendamente en un fin de semana. Aprovecha y visita sus palacios, como el de Hofburgh, el de Belvedere o el de Schönbrunn, y no dejes de probar la famosa tarta Sacher en alguno de sus cafés del centro.
7. Oslo Recorre Oslo en bicicleta. © PGM
Oslo es una ciudad perfecta para recorrerla caminando y, si te gusta el arte y la arquitectura moderna, disfrutarás enormemente en lugares como el edificio de la Ópera & Ballet de Oslo, el Museo de Astrup Fearnley, la Galería Nacional o el Museo Munch. No te pierdas el alternativo barrio de Grünerlokka ni el singular cementerio Æreslunden.
8. Florencia. Atravesar el Ponte Vecchio es uno de los must en Florencia.
Florencia es una de esas ciudades a las podrías volver decenas de veces visitando los mismos lugares: recorrer su plaza del Duomo para subir hasta lo alto de la catedral y contemplar en interior del Baptisterio, detenerte a admirar las vistas del Puente Vecchio mientras degustas un helado italiano y recorrer despacio, una a una, las salas de la Galleria degli Uffizi.
9. Berlín. Reichstag, 2018. ©Kelu RG.
Aunque se haya viajado con anterioridad a Berlín siempre apetece volver porque es una ciudad que parece que siempre está cambiando. Alexanderplatz es el centro de todo, pero además no podrás resistirte a la Isla de los Museos, al Reichstag, al Checkpoint Charlie o a la Puerta de Brandeburgo, tan cargados de historia como el sobrecogedor Memorial del Holcausto.
10. Londres El Palacio de Westminster con la torre del célebre reloj que tiene una campana llamada Big Ben.
A Londres puedes viajar tantas veces como quieras porque siempre encontrarás algo diferente que hacer. Si vas por primera vez, tendrás que parar en sus lugares obligados: el Palacio de Westminster con el célebre Big Ben, Chinatown, el Palacio de Buckingham, Hyde Park, el mercadillo de Portobello…Pero si repites elige un plan (museos, compras, espectáculos…) y piérdete por esta singular ciudad aunque sólo sean dos días.